De zozobra a tragedia

31/03/2015
 Actualizado a 15/09/2019
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Una vez más la tragedia se ha consumado. Las entrañas de la tierra se han llevado consigo la vida del minero y compañero José Pereira. Una tragedia que viene a arrojar toneladas de indignación a miles de ciudadanos de las comarcas leonesas cuyo único medio de vida ha sido tradicionalmente la mina. Comarcas mineras que llevan mucho tiempo inmersas en el abismo de la zozobra, de la tristeza, de la melancolía.

Comarcas venidas a menos por decisiones políticas. Por la privatización del sector energético, por la avaricia de las eléctricas. Cuencas mineras que en sus buenos momentos tenían auge y brotaba vida de sus gentes. Explotaciones que en su día eran rentables sin recibir ninguna subvención. Ahora han dejado de serlo por las equivocadasdecisiones.

El sector energético es lo suficientemente importante para un país como para que estén en manos de los especuladores,su coste influye directamente en la economía de las familias y las empresas. Es un chollo para las empresas que se han hecho con el negocio, lucrándose a cuenta de la inversión pública.

Lo que ha cambiado a día de hoy, es que estos especuladoresimportan el carbón a precio de ganga. Carbón producido por trabajadores de países donde apenas existenderechos laborales, con sueldos míseros, un mundo similar al que nos describe Emilio Zola en su obra ‘Germinal’. Una perfecta descripción de lo que es vivir en una sociedad de miseria. Pretenden que nuestros mineros cobren 900 euros por realizar un trabajo tan penoso debajo de la tierra. Todo sea por ahorrar costes, ahorro que no repercutirá para nada en los ciudadanos y las facturas que pagamos en nuestros recibos de la luz, más bien contribuirá a inflar los bolsillos de unos pocos parásitos que viven a expensas del sudor de los demás. El conflicto de las cuencas mineras sí tiene solución, solo basta adoptar medidas políticas que pasan por poner en su sitio a las eléctricas y los empresarios mineros especuladores, solo se precisa voluntad.
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