De Ruta, de Camino, todo por dar un cocido

Coincidencia o no, esta semana se ha constituido por fin la Asociación de Municipios del Camino de Santiago, casi al mismo tiempo que conocíamos que el alcalde de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, ha sido elegido presidente de la Red de Cooperación de Ciudades en la Ruta de Plata, una entidad que promueve el itinerario por todo el oeste peninsular, de norte a sur.

Astorga, como saben, no pertenece a esta entidad por cabezonería del antiguo regidor Alonso Perandones, quien, con toda la razón, argumentaba que la verdadera Vía de la Plata solo comprende el trayecto entre Mérida y Astorga (Emerita Augusta - Asturica Augusta). Por ello, bajo su impulso, se constituyó otra de no menos superlativa nomenclatura como fue la Asociación de Pueblos en Defensa de la Vía de la Plata. Una organización que solo quería aglutinar municipios incluidos en el trazado histórico.

Claro, el tiempo y el amigo Darwin han hecho el resto. La selección natural hace que sobrevivan los más fuertes, y Astorga y Mérida poco tienen que hacer con lugares como Gijón, León, Zamora o Sevilla. La potencia de una agrupación ha engullido a la otra. Actividades innovadoras y propuestas casi mensuales hacen que la ventaja sea enorme. De hecho este humilde informador hace muchos meses que no tiene noticias sobre la entidad presidida, al menos mientras fue alcalde, por el amigo Perandones.

Palazuelo, que de tonto no tiene un pelo, sabe que La Bañeza está incluida en el trazado histórico, el que comprende entre las dos augustas ciudades, y que la vía en cuestión alcanza ese trayecto y solo ese. Pero también conoce que la verdadera promoción de su ciudad solo era posible integrándose en la Red de Ciudades, y así ha sido. El alcalde bañezano, como nuevo ‘mandamás’, tiene un objetivo casi primordial; convencer a Mérida y Astorga para que se adhieran, algo tan básico como positivo para ellos.

Y para empezar y de una forma muy sutil ha separado los conceptos, algo que quizás antes no se había hecho con claridad. Su asociación integra los municipios que componen la Ruta del Oeste, la que en parte recorría la línea ferra llamada Ruta de la Plata. Y dentro de la misma se encuentra el trazado histórico que comprende las villas antes mencionadas. Ese puede ser un excelente argumento para que Emerita y Asturica entren de una vez.

Fíjense que una de las últimas acciones de la Red ha sido la publicación en Francia de una guía en la que están representados todos los municipios socios. Un manual que recorre los caminos históricos de España y en donde La Bañeza, por ejemplo, cuenta con tres páginas de información. Eso es algo que Astorga no puede desaprovechar. La capital maragata se tiene, se debe y necesita dar el sí quiero a Red. Manteniendo su identidad, siendo importante, pero entrando. La bimilenaria ciudad tiene la suerte de ser un cruce de caminos como pocos en Europa, y solo se está centrando en el de Santiago, lógico, pero no único. La Plata aumenta sus peregrinos y su importancia cada día y Astorga no puede perder ese tren. Hay que dar cocidos y vender mantecadas a los que vienen del este, pero también a los que llegan del sur.

La Bañeza ha comprendido que más allá de la historia está el futuro de sus gentes. Y, defendiendo el trazado romano, ha sabido unirse a la liga de primera división. La muy noble también debiera seguir ese paso sabiendo, como sabe, que solo con entrar en dicho grupo pasará a ser uno de los filones de la asociación. Hace unos días el propio Palazuelo me contaba que había mantenido una larga conversación con su homólogo astorgano; a buen seguro entró este asunto en la charla. García, como buen historiador, sabe que la razón del hecho histórico la tiene. Ahora también debe ejercer como buen alcalde y adherirse por el bien de la urbe.

Asturianos, leoneses, extremeños y andaluces se han tomado en serio dar vida de nuevo a este corredor. Y lo hacen bajo una asociación que se dedica a la promoción turística con muchas e interesantes iniciativas. Astorga hace tiempo que apostó por el turismo casi como única fuente económica; ahora hay que tomar con fuerza todas y cada una de las iniciativas que se erijan ganadoras. Los garbanzos deben bailar al son del visitante, sea de donde sea y venga de donde venga.