Dar la cara

La apuesta de Luis Ángel Caro y Óscar González parece derribar prejuicios. Acaban de abrir un negocio de hostelería, ‘Cara B’, en Sorbeda del Sil (Páramo del Sil). Se enfrentan al declive de la minería, a la España vaciada y a la pandemia, obstáculos a los que se suman los posibles problemas propios de la puesta en marcha de cualquier actividad económica, mucho más en un momento de crisis. Una lucha para la que no han contado, según denuncian, con la administración pública, a pesar del manoseado discurso de apoyo a los municipios mineros, a los vaciados y de recuperación de tejido económico castigado por la pandemia. Es cierto que principalmente se trata de un proyecto de autoempleo, posible gracias a las raíces de ambos en el territorio, lo que demuestra que los argumentos para ponderar el medio rural siguen estando ahí o lo están ahora más que nunca. Sin embargo, pese a que no creará cientos de puestos de trabajo puede ser el inicio de una tendencia que contribuya a frenar la sangría de su entorno. Es inspirador y ellos han dado la cara, desde su iniciativa privada, antes de la llegada de ninguna subvención o ayuda. Están convencidos de su éxito, tras emprender el camino de regreso, por el que ya se habrán cruzado con otros cientos, quizás miles de leoneses. Es muy necesario que proyectos como el suyo cuenten con apoyo, porque es muy necesario que salgan bien.