Dani Martínez: "León me abre un abanico más amplio de posibilidades"

Podría parecer un acto de coraje en unos tiempos marcados por la corrección política y la ‘ley mordaza’, pero ‘¡Ya lo digo yo!’ se queda en un ámbito doméstico que ha llevado al cómico leonés a articular un show a su medida con buenas dosis de improvisación

Joaquín Revuelta
19/12/2018
 Actualizado a 18/09/2019
307092741
Hay temas que pasan inadvertidos para la mayoría de la gente. Incluso hay temas de los que todos hablamos por encima, sin entrar en detalles. Esos temas conforman el nuevo espectáculo del humorista leonés Dani Martínez, que este viernes y el sábado representa en única función a las 21:00 horas en el Auditorio Ciudad de León con entradas a 18,70 euros. ‘No os preocupéis... ¡Ya lo digo yo!’ ha sido calificado como un espectáculo «moderno e innovador», en el que la improvisación ocupa el 50% de una representación en la que las nuevas tecnologías están muy presentes.

– No sé si en estos tiempos de corrección política y ‘ley mordaza’, donde los cómicos se encuentran en el ojo del huracán, alguien se atreve a decir las cosas como son. Ignoro si el título de su nuevo espectáculo va por ahí o en realidad se va por otros derroteros.
– Los títulos de mis espectáculos los pongo con frases de mis amigos o gente de León, y luego ya lo empiezo a desarrollar. Por ejemplo, el anterior se titulaba ‘Martínez, que no eres bueno’ porque era como me saludaban a mí los señores de mi pueblo, en Hospital de Órbigo. ‘Ya lo digo yo’ es una frase que utilizan mucho mis amigos cuando estamos todos hablando de medias verdades o de alguien o sobre algo. Sí es verdad que es un título muy potente en el que parece que se van a decir cuatro verdades, pero en el que se habla de temas muy banales que todos vemos en el día a día, y nada de política, aunque sí que abordo la problemática de Maluma en la música del país.  

– Pero supongo que como cómico y  como ciudadano de este país le preocupa esta vuelta a la censura que pretende implantar serias restricciones a la libertad de expresión.
– Sí, pero yo siempre digo que para mí lo importante es el contexto. Todas las cosas hay que ponerlas en contexto y hay que saber cuándo alguien está haciendo una broma y cuándo no. Yo por ejemplo en el concurso que presento en Cuatro hago muchas bromas sobre mi madre, y eso no significa que no la quiera. Creo que es importante el contexto y, claro, vivimos en una época en la que las redes sociales hacen que todo se propague rapidísimo, incluso a veces la información llega a medias. Tenemos que poner todas las cosas en contexto e informarnos bien de lo que ha pasado. Por otra parte, creo que el humor debe tener un espacio de libertad y que cada cual haga humor de lo que le gusta y de lo que le parezca. Porque al final todos, en nuestros grupos de amigos, hacemos un humor mucho más bestia o en los grupos de whatsapp se mandan cosas mucho más brutas que lo que pueda hacer un cómico ahora mismo en televisión.    

– La imagen del cartel de su nuevo espectáculo parece rendir homenaje al genio de Groucho Marx. ¿Es uno de sus referentes dentro del humor?
– A mí lo que me gusta de Groucho Marx es esa agilidad mental, esa rapidez en la respuesta. He visto entrevistas con él y ese ingenio en la improvisación es una de las cosas que más cultivo yo de siempre, con Flo, en la radio... De hecho en ‘¡Ya lo digo yo! más del 50% del show parte de la improvisación. A mí me gusta que en cada ciudad el espectáculo pueda ser diferente. No tengo la genialidad de Groucho Marx, es inimitable y por eso ha quedado como uno de los grandes referentes del humor, pero la foto es muy potente, efectivamente, porque me gustaba generar un título que pareciera que iba a poner las cosas en su sitio y además incorporo un cartucho de dinamita en la boca como sugiriendo que me va a explotar de lo que voy a decir. Pero luego vas al espectáculo y te puedo hablar de Instagram.  

– Este fin de semana le toca jugar en casa. ¿Ese aspecto le condiciona de alguna manera a la hora de plantear un espectáculo que cuenta con ese alto nivel de improvisación?
– Yo siempre que he venido a León ha funcionado todo muy bien. Juego con esa ventaja. La última vez que vine con Flo hicimos un repaso de sitios y personas de León susceptibles de formar parte del show. Claro que eso me ayuda muchísimo a bajar e improvisar con la gente sobre los temas de aquí. En ese sentido creo que en León tengo un amplio abanico de posibilidades.

– El espectáculo va a ser en solitario, pero también ha trabajado interactuando con otros compañeros de profesión. ¿En qué formato Dani Martínez se encuentra más cómodo?
– La verdad es que cada cosa tiene lo suyo. He tenido la suerte de encontrar en su momento a alguien como Flo, que era como actuar yo solo porque todo lo que yo tiraba me lo recogía bien o él me las ponía botando para que yo brillara, y eso es como actuar en solitario. Con Flo podía saltarme cualquier norma, que él me la iba a recoger, me iba a ayudar y demás. Las dos cosas tienen su punto, las dos cosas funcionan. Personalmente me gusta mucho combinarlas. Este espectáculo llevo cuatro o cinco meses escribiéndolo, me gusta estar en mi casa pensando en lo que voy a hacer sin consultar con nadie, simplemente lo que yo creo, pero luego hay compañeros como Flo que te permiten brillar tanto o más que cuando estás tu solo.  

– ¿Las imitaciones siguen formando parte de sus espectáculos o las ha ido abandonando con el paso de los años?
– Efectivamente, cuando empecé en la radio en el año 2002 yo solo imitaba, no hablaba ni con mi voz. Yo pensaba que sólo funcionaba si hacía una voz y un personaje. Y ahora mismo el único sitio en el que recurro a la imitación es en mi espectáculo, donde tan solo ocupa 10 minutos de los 90 que dura el mismo. Cuando te dedicas a esto empiezas a evolucionar y en mi caso he doblado películas de animación, he presentado programas, he sido actor en series de televisión... El registro va creciendo y al final más que un imitador te reconoces en un cómico capaz de desarrollar todas esas capacidades. Lo que hago en este espectáculo es utilizar el doblaje en directo, las imitaciones, cantar, improvisar con el público, utilizo audiovisuales, hay juegos con música... todo ese tipo de cosas para que el espectáculo esté muy vivo. Cada cinco minutos pasa algo diferente y por las funciones que ya llevamos hechas la gente se marcha con la sensación de haber visto a un tipo hacer un montón de cosas en tan solo una hora y media. Y ese era el objetivo del espectáculo.  

– ¿Le gusta diversificar su actividad en distintos medios como la radio, la televisión, el cine a través del doblaje, los espectáculos en directo o es que todavía no ha encontrado ese lugar donde asentarse y echar raíces?
– Sabes qué me pasa, que cuando estoy en un sitio soy de los que piensan que me gustaría estar en el otro. Todo el tiempo me marco retos porque profesionalmente quiero evolucionar, quiero crecer. Pero una de las cosas que más me gustan es el teatro, porque el teatro es acción-reacción, la respuesta inmediata. Cuando hago un programa de televisión no sé la reacción que está teniendo en una casa. Pero el chiste que yo preparo en mi casa a las tres de la mañana mientras veo la NBA lo suelto y en ese momento digo, funcionó o no. El teatro tiene pues ese punto de inmediatez en la respuesta que tu esperas del público.  
 
– Creo que fue Picasso quien dijo que ‘la inspiración me encuentre trabajando’. ¿Como artista es más metódico y disciplinado de lo que podría parecer?
– Total. Yo soy super metódico. Suelo estar en cuatro o cinco cosas a la vez y  tengo que organizarme para intentar estar bien en todas. Ahora estoy también con un amigo guionista escribiendo un guión para el cine, más los espectáculos de la gira, sigo con la radio, presento el concurso de televisión, tengo un festival de música, donde me encargo de la producción. Todo ese tipo de cosas te obligan a que tengas que organizarte bien para poder llegar a todo. Pero es que a mí me gusta, me motiva estar en varias cosas, creo que funciono mejor que estando centrado en una sola actividad.  

– Me decía que actualmente se encuentra inmerso en la escritura de un guión para el cine. ¿Le gustaría lograr el éxito que ha obtenido su compatriota Leo Harlem con ‘El mejor verano de mi vida’?
– Hombre, pienso que a cualquier actor le gusta un papel protagonista en el cine y más si se trata de una película capaz de conectar ampliamente con la audiencia. Pero lo que de verdad me gusta del éxito de Leo Harlem y de Dani Rovira es que hayan abierto la senda para que los cómicos tengan un mayor peso en el cine. En mi caso tuve una idea hace algún tiempo y cuento con amigos dentro de la industria del cine. Con uno de ellos hemos empezado a desarrollar esa idea a la que, como estoy metido en tantas cosas, intento dedicar el tiempo que puedo. Pero la verdad es que me apetece mucho hacerlo y en eso andamos.
Archivado en
Lo más leído