Cupara: "La clave en un tiro así es la suerte y la intuición"

"Si Biosca no hubiera estado tan bien no habría tenido la ocasión de detener ese último tiro", apunta el héroe del Abanca Ademar en Suiza

Jesús Coca Aguilera
17/11/2017
 Actualizado a 19/09/2019
Biosca señala a Cupara, el héroe del triunfo con el Kadetten. | JAVIER QUINTANA
Biosca señala a Cupara, el héroe del triunfo con el Kadetten. | JAVIER QUINTANA
A cinco segundos para el final, el triunfo que durante muchos minutos parecía atado amenazaba con escapársele de las manos al Abanca Ademar. Y es que, tras llegar a haber tenido hasta nueve goles de ventaja, el Kadetten suizo le había dado la vuelta al encuentro, consiguiendo ponerse por delante a cinco minutos para el final, y con 23-24 en el marcador forzaba en el último suspiro un siete metros que podía darles el empate.

La igualada servía de poco a los suizos, que aún con ella parecían decir adiós a sus aspiraciones de seguir adelante en la competición, pero dañaba más a los leoneses, a los que hubiera dejado sin margen de error en los dos próximos duelos.

Y entonces apareció Cupara, que había entrado en el ecuador de la segunda mitad al campo. El meta serbio empezó a dar saltos para intentar presionar al lanzador. Aguantó su primer amago. Dio un paso adelante para tapar huecos y adivinó su lanzamiento moviendo el brazo para despejarlo.

La parada era definitiva. Los dos puntos se iban al bolsillo del Ademar, que lo celebraba sobre la pista suiza como si de un título se tratase. Las opciones europeas seguían intactas y el meta se erigía en héroe. De hecho, reconocía este viernes a La Nueva Crónica que «nunca me había pasado algo así y me siento muy feliz, es complicado de describir», explicando que «en el momento no tenía claro cómo iba a tirar, fue intuición. Había estudiado a los jugadores del Kadetten, pero en un momento así eso no ayuda mucho, es cuestión sólo de suerte e intuición».

«Nunca me había pasado una situación así, me hizo muy feliz. Grité como un león al ver que lo paraba» No obstante, ni en el momento de señalar el penalti notó un exceso de responsabilidad o nervios, sólo se puso a «pensar qué hacer para que me pegara el balón». Aunque eso sí, según lo detuvo afirma que «grité como un león al ver correr a mis compañeros hacia mí, era un triunfo del equipo entero».

La portería ademarista volvía a ser decisiva, pues si el serbio acertó en la acción decisiva, Nacho Biosca fue fundamental para que en la primera mitad los leoneses adquirieran la importante ventaja, firmando en ella un porcentaje de acierto de más del 50%.

«Si Biosca no hubiera estado tan bien y parado tantos balones, yo no hubiera tenido la oportunidad de parar ese último tiro», apuntaba Cupara sobre el papel de su compañero, que ha dividido el protagonismo entre los guardametas a base de grandes actuaciones, y de quien el serbio no dudaba en señalar que «está en un gran estado de forma, por eso debo trabajar al máximo y hacerlo lo mejor posible cuando el entrenador me meta en la pista».

Mantener ese espectacular rendimiento de la portería será fundamentalpara superar el próximo sábado al Skjern en el Palacio y el domingo siguiente al Elverum noruego, lo cual clasificaría al Ademar para la ‘Champions’ y lo haría además en la primera posición.

El conjunto leonés, que llegó este viernes en torno a las 6 de la tarde tras salir por la mañana de tierras suizas, se entrenará este sábado en el Palacio, pues el domingo a las 18:00 horas deberá medirse en choque liguero al Huesca.
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