El sufrimiento por el descenso se quedó en la antesala del encuentro, en los momentos previos de ponerse en la peor de las situaciones. Cuando el balón echó a rodar, todo se fue dando sobre ruedas para que no se viera un nunca un peligro real.En la primera parte, cuando la Cultural no era capaz de transformar sus ocasiones, porque sus rivales pinchaban, llegando a ir cinco de los siete que le afectaban perdiendo. Y en la segunda, porque a los dos minutos de la reanudación los leoneses se pusieron ya por delante con una jugada de billar que acabó con el balón rebotando en Obolskii y convirtiéndose en el 1-0, y con marcador en contra el Talavera bajó los brazos y los de Israel fueron muy superiores, ampliando distancias por medio de Solís y no teniendo consecuencias el enésimo error grave de Salvi con el que el rival recortó distancias.
3-1 ganó la Cultural, pues Muguruza redondeó en la última jugada del encuentro la goleada y su extraordinaria actuación, cumpliendo así con su labor para terminar en décima posición sin necesidad de comprobar, cómo así hubiese sido, si el resto de equipos le hacían los deberes en caso de derrota.
Solís falló un mano a mano y el palo evitó el gol desde más de 40 metros de Muguruza en la 1ª parte, que acabó 0-0 El triunfo y la evidente superioridad leonesa, ante un Talavera que dejó la pobre imagen que se puede esperar de un equipo que termina la liga como colista y además sale sin sus mejores jugadores, calmó en cierta medida los ánimos de una afición que en varios tramos del encuentro había pedido en un considerable número la dimisión del director general Felipe Llamazares, pero que en el césped vio a su equipo marcar por primera vez en toda la segunda vuelta más de un tanto y pudiendo haber firmado una goleada de escandalo de haber afinado más la puntería.
Por la banda derecha, donde Muguruza fue un constante puñal y su conexión con Percan desarboló a la defensa manchega, llegó prácticamente todo el peligro culturalista, incluidas las dos ocasiones más claras de una primera parte que terminaba sin goles pero con la sensación de que a poco que la Cultural apretara a la débil defensa rival los goles caerían.
Había tenido el 1-0 en dos ocasiones Solís, especialmente en una donde tras un pase atrás de Percan tiraba sin nadie alrededor y frente a un portero a cuyo cuerpo iba el balón, pero también en otro disparo al borde del área tras una acción de raza de Castañeda que se iba fuera por poco tras rozar en un defensa.
De Tarsi nacieron 2 goles. En el 1-0 su pase lo despejaron pero dio en Obolskii y entró. En el 2-0 dejó solo a Solís Pero el más listo de la clase fue Muguruza. En la primera parte, con el rival despistado tras una falta a Percan, llegaba desde atrás para pegarla casi desde el centro del campo a puerta, superando al portero adelantado pero dando su disparo en el larguero. Y, cuando sólo iban dos minutos de la segunda mitad, sacando rápido un saque de banda para coger la espalda de la defensa conectando con Tarsi, que pisaba área libre de marca y ponía un pase atrás que daba en Obolskii, luego en un defensa y el despeje de este de nuevo en el ruso que estaba en el suelo, acabando el balón en el fondo de la red.
Tenía que ser con algo así de estrambótico como se abriera la lata en el día de la despedida de una Cultural que, por si todavía había alguna duda, logró al cuarto de hora la sentencia. Como en el primero en el pase que originaba el gol el protagonista era Tarsi, que esta vez combinaba por dentro con un Solís que controlaba, la pegaba con la zurda y tras tocar el balón en un defensa veía cómo se colaba por encima del guardameta.
El 2-0 no dejaba ya lugar a dudas sobre quién se llevaría los puntos y, con la tranquilidad que eso provocaba, la escuadra leonesa se gustó y se soltó, teniéndolas un Obolskiii al que le faltó potencia en varios remates claros, algunos tras grandes combinaciones, y no rematando nadie en boca de gol un centro-chut de Muguruza.
Sin embargo lo que llegó fue otro clásico de los últimos meses, el clamoroso fallo de un Salvi al que sólo su increíble primera vuelta libra ante el carrusel de errores graves de las últimas semanas. Esta vez directamente se lo metió en propia, pues tras un pase atrás de Trigueros, flojo y sin que el meta tuviera nadie cerca, al ir a controlar el balón este le pasaba por debajo y se introducía manso en el fondo de la red.
Salvi regaló otro gol al ir a controlar un pase y pasarle el balón por debajo. Muguruza, de falta en el 93’, hizo el 3-1 No hubo que lamentar consecuencias, porque vía regalos era la única forma de que el Talavera marcara. Y como no se cometieron más, el partido murió entre cambios con sabor a despedida, como la evidente de Solís o la posible de un Obolskii a quien parte del Reino se puso en pie para ovacionar cuando en el minuto 90, con el partido decidido, Israel metió a Claudio.
Además, todavía hubo otro gol, el que merecía Muguruza. En la última acción de la segunda vuelta, pues ni se sacó de centro, llegó el primer gol a balón parado de la misma, al lanzar a la perfección una falta por encima de la barrera.
No es consuelo para una temporada tan especial como la del Centenario, pero al menos este sábado la tragedia nunca fue una opción. La Cultural seguirá en Primera Federación otro año más. No es algo que se hubiese firmado pero, tal y como se puso, es la mejor noticia.