Consumistas

Me encanta la Navidad, pero he de decir que cuando se va acercando la fecha, tiemblo. Más bien es mi cuenta bancaria la que tiembla, y mi báscula también. Cada año se incrementa la larga lista de compromisos monetarios: cenas de Navidad, de empresa, comidas con amigos a los que ves menos, amigos invisibles varios, regalos... El tema de los regalos es algo muy curioso, porque hasta hace poco yo hacía el Agosto con la Navidad, pero desde que trabajo se acabó el chollo. Y ahora a la que le toca soltar es a mi. La vida es dura... Pero para seguir alimentando nuestro consumismo en estas fechas –como si ya fuera poco– en España ya hemos normalizado el llamado Black Friday o ‘viernes negro’. Una práctica norteamericana, como casi todo lo relacionado con las compras compulsivas, que adelanta los descuentos de Navidad a finales de noviembre para que la gente se vaya animando y básicamente compre dos veces. Porque no lo vamos a negar: puede que muchos lo aprovechen para ir comprando regalos, pero seguro que en diciembre vuelves a caer. Y así la rueda no se para. La parte positiva de la historia es que este tipo de campañas también fomentan el empleo, y en concreto en León se estima que se va a incrementar en casi un 18%. Igualmente, según numerosas encuestas, un 45% de los españoles que compran productos tecnológicos en estas fechas se arrepiente antes de los tres meses. Pasado ese periodo, lo suelen vender en el mercado de segunda mano. El ser humano, que es fascinante... También aseguran que cada uno de nosotros se gastará una media de 89 euros, llegando otros estudios a afirmar que generaciones como la Millenial superarán los 200 euros. Además hay marcas que hacen descuentos tan disparatados como el fabricante de móviles BQ, que venderá smartphones, libros electrónicos y tabletas a un euro. Seguramente muchos de los que lean ‘un euro’ no se lo piensen y compren el pack completo, pero a mí me hace desconfiar. Directamente pienso que tiene que ser una basura. Ahora digo todo esto, pero yo seré de las que me rendiré.