Como estábamos

La sanidad y su reforma, o la reforma de su reforma, ha centrado muchos debates en Las Cortes y ha supuesto primer gran punto de conflicto entre PP y Ciudadanos, que parecían un mismo partido hasta el momento en que se presentó la moción por parte del PSOE y mostraron públicamente su división.  Con su importancia demostrada una y mil veces, de forma más clara que nunca durante la pandemia, se ha teorizado mucho sobre la sanidad y la necesidad de su buen funcionamiento para que la sociedad se pueda llamar del bienestar. Sin embargo, los electores sabemos que las posturas enfrentadas, pero no tenemos claro cuál es de la cuál, qué diferencia exactamente la forma de enfocar la maquinaria sanitaria de unos partidos y de otros. El principal problema es que se trata de un tema que sirve a nuestros políticos para marcar perfil, sin que tengan demasiado claro qué es lo quieren y más bien se dediquen a aclararnos lo que no quieren. Para salir de dudas, estaría bien un poco de información real, pero si el presidente de la Junta llega a León y dice que la sanidad será personalizada en cada municipio pues, la verdad, nos quedamos como estábamos.