Ciñera no olvida a don Florentino

La localidad homenajeó al que fuera su párroco durante décadas con un sencillo y sentido acto de reconocimiento en el que se descubrió una placa

Estefanía Niño
21/02/2019
 Actualizado a 15/09/2019
Un momento del acto celebrado en la localidad de Ciñera. | J.V. CIÑERA
Un momento del acto celebrado en la localidad de Ciñera. | J.V. CIÑERA
La localidad gordonesa de Ciñera rindió un sentido homenaje a don Florentino Valbuena Vélez, el que fuera su párroco durante décadas, y que falleció el pasado año. Un acto promovido por la Junta Vecinal de Ciñera que contó con la asistencia de los vecinos de la localidad, así como del obispo de León, Julián López Martín. Una sencilla misa seguida del descubrimiento de una placa en la fachada de la iglesia parroquial en la que puede leerse: "Con todo el cariño y reconocimiento del pueblo de Ciñera a D. Florentino Valbuena Vélez (1933-2018). Nos hiciste dos regalos: tu amor inacabable y tu recuerdo inolvidable. Junta Vecinal de Ciñera 17 de febrero de 2019".

Desde la Junta Vecinal Ángela Moro fue la encargada de leer unas palabras en las que dejó claro el porqué del cariño de los vecinos de Ciñera su párroco y el sentido de este homenaje. "Es comentario frecuente, entre los vecinos más mayores del pueblo, que mostró, desde el primer día de su llegada a Ciñera, una empatía y una tolerancia para con todos, para con todos por igual, que le hicieron merecedor del cariño general",además de "una sencillez, un saber estar y comprender que le hizo, desde el primer momento ser considerado y respetado por todos los que conformamos el pueblo de Ciñera, más allá de las creencias personales de cada uno".

Esa era su virtud, "la de unir, la de respetar e intentar comprender, la de sobreponerse y convivir con los muchos cambios que le tocaron vivir. Y la de ser una persona caritativa quizás más allá de sus posibilidades, y serlo sin alardes, por convicción". En la lectura, también destacó que era un buen amigo "porque escuchaba sin juzgar, aconsejaba sin imponer, ayudaba sin esperar retorno". Por ello, continuó, "desde la Junta Vecinal de Ciñera, no podemos, ni debemos, juzgar su ministerio, su labor pastoral. No nos corresponde a nosotros, no depende de nosotros. Nosotros hablamos de la persona, que incluye su profesión, su fe, su vida, todo".

Cuando don Florentino falleció, y escuchando el sentir de muchos vecinos, desde la Junta Vecinal solicitaron al Ayuntamiento que pusiese su nombre a la plaza. Para ello argumentaron que "creíamos, y lo seguimos creyendo, que cuando se designa a una calle, plaza o avenida con el nombre de una persona, el motivo principal por el que se hace es para, de alguna manera, honrar logros, compromisos, comportamientos, dedicación, etc. Entendíamos, y seguimos entendiendo, que esa es una manera de perpetuar a esa persona que se quiere enaltecer". La solicitud se cursó pero, "lamentablemente la respuesta por parte del Ayuntamiento no ha sido la esperada". Por ello, desde la Junta Vecinal "tomamos la iniciativa de perpetuar su recuerdo con este, sencillo acto. Quizás a todos nos gustaría que hubiese más pomposidad, más glamour, más opulencia. Quizás eso nos gustaría a todos menos a él, a don Florentino, porque a él le gustaban las cosas modestas, humildes, como humilde era él. En nombre del pueblo de Ciñera, nosotros, la Junta Vecinal, queremos decirle, decirte, Gracias don Florentino, gracias Floro".

El homenajeestaba previsto para hacerlo el mes de julio del año pasado, cuando el párroco les anunció su idea de ir a vivir a otro lugar. Entonces decidieron llevarlo a cabo, con el deseo de que él también participase, pero lamentablemente, don Florentino falleció
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