Cendón: "Duele un poco que los responsables de la represión de tu familia tengan una calle en León"

Entrevista a Javier Alfonso Cendón, presidente de Aerle

D.L. Mirantes
13/08/2017
 Actualizado a 15/09/2019
El presidente de Aerle, Javier Alfonso Cendón. | L. PASTORIZA
El presidente de Aerle, Javier Alfonso Cendón. | L. PASTORIZA
El debate está servido. El Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de León cuenta ya con un informe de expertos que aboga por cambiar los nombres de 9 de las 33 calles franquistas del callejero leonés para cumplir con la Ley de Memoria Histórica. Ni las fuerzas políticas ni las asociaciones han participado en la redacción del estudio. Desde la Asociación de Estudios Sobre la Represión en León (Aerle), uno de los promotores de la de la denuncia para que se cumpla, su presidente, Javier Alfonso Cendón, muestra su desacuerdo con la falta de diálogo.

–¿Qué le parece que se proponga el cambio del nombre de 9 de las 33 calles?
–No me parece bien, la verdad. No sé si es una decisión definitiva o el punto de partida para debatir. Si es para debatir lo puedo entender y no hay problema.

–¿No les invitaron a participar?
–Hubo una reunión previa en la que se nos dijo que nos llamarían para tratar este tema en una comisión de expertos. Realmente me pareció que hubo buena voluntad, pero lo siguiente que hemos visto es lo que ha salido en la prensa.

–¿Qué le parecen establecer cómo criterios que el nombre fuera anterior a la Guerra Civil o que se otorgara por méritos que no estén a priori relacionados de forma directa con el régimen?
–Son argumentos que no comparto mucho. Me inclino más hacia lo que han escrito algunos historiadores contemporáneos, entre los que se encuentran profesores de la Universidad de León. Yo no soy ningún experto, en la asociación no lo somos. Cuando planteamos la denuncia lo que pedimos fue que se hiciera un catálogo de vestigios franquistas. Y en ese catálogo dábamos algunos ejemplos. Algunos, como hemos visto y ha quedado demostrado, eran erróneos y otros muchos directamente no se incluyeron, como es el caso de la calle Carrero Blanco, la de Mercaleón, que hasta ahora no había salido en las listas.

–¿Deberían estar esos historiadores en la comisión?
–Me gustaría una comisión en la que estemos todos. No es afán contra nadie. Llevamos mucho retraso porque esto tenía que haberse hecho ya, así que vamos a hacerlo entre todos. Tienen que estar el Ayuntamiento, los diferentes grupos, expertos en historia contemporánea, la Universidad de León, tenemos que estar la sociedad civil, las asociaciones...

–Y el juzgado.
–Hay una denuncia. El juzgado establecerá y determinará si se nombra una serie de peritos o expertos en Historia Contemporánea que establecerán que calles se cambian. Pero creemos que es importante establecer una comisión de expertos a través del Ayuntamiento. En principio parecía que había buena disposición.

–¿Y consultar a la ciudadanía?
–El callejero es de todos, pero el asunto todavía está en manos del juzgado.

–¿Cuándo cree que se harán los cambios? ¿Manejan plazos?
–Las víctimas no pueden seguir esperando que haya una decisión judicial que obligue a cumplir la Ley de Memoria Histórica. El tiempo pasa y por razones biológicas mucha de la gente que sufrió la represión está desapareciendo y es muy duro que un responsable de la represión de uno de tus familiares o de uno mismo tenga una calle en León por la que pasas todos los días… duele un poco.
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