Castrillo de los Polvazares contribuye a la confección de materiales de protección

La localidad de Castrillo de los Polvazares, municipio de Astorga, se ha sumado a la iniciativa de fabricación de mascarillas caseras. Una propuesta en la que trabajan entre 15 y 20 familias, realizando, algunas de ellas, hasta 30 de estos medios de protección diarias. Hasta el momento han sobrepasado la cantidad de 300 –aunque con el proceso ya mecanizado el número de mascarillas está aumentando exponencialmente–, que se han ido distribuyendo tanto a residencias de mayores de la zona como a algunas juntas vecinales de pueblos cercanos, para repartir entre los vecinos, así como al Centro de Salud de Astorga y a la Comandancia de la Guardia Civil en León. "La demanda es muy grande", señalan desde la Junta Vecinal de la localidad maragata, que relata que esta iniciativa se prolongará en el tiempo lo que sea necesario, siempre que se cuente con la participación ciudadana, porque "tela tenemos toda la que queramos", gracias a la donación de la empresa local Aiptesa, a la que el organismo local agradece su gran aportación.

Las mascarillas están elaboradas con algodón blanco, sin tratamiento químico, realizadas con doble capa. Además, alguna cosedora ha propuesto dejar una apertura para la posible inclusión de un filtro de papel a mayores. El proceso, por su parte, cumple con todas las condiciones higiénicas, con el objetivo de evitar posibles contagios, por lo que las mascarillas se realizan en las propias viviendas, siendo recogidas puerta a puerta.

Una labor de empatía y solidaridad, sobre todo con los que están al pie del cañón luchando contra esta pandemia, que además supone una satisfacción personal entre los voluntarios, "para los que es casi una terapia". Porque toda ayuda es bien recibida, y todo gesto una gran aportación en la lucha contra el coronavirus.