Llama la atención que sean los leoneses los que menos dinero vayan a gastar de Castilla y León en ocio y diversión. Lejos de sus 65 euros de media por vecino están los 132 de Valladolid o los 105 de Burgos. Tampoco se encuentran entre los que más confían en la suerte. Sólo invertirán menos en lotería que en León en Salamanca (60 euros) y Ávila (70 por persona), mientras que los sorianos comprarán décimos y boletos por valor de 185 euros, los vallisoletanos por 130 euros o los burgaleses por 125. Tampoco los regalos y los juguetes supondrán una gran inversión para los leoneses y únicamente los zamoranos gastarán menos en ambos conceptos. En lo que sí que están dispuestos a rascarse un poco más el bolsillo es en las comidas y cenas navideñas en casa. Los 180 euros que gastarán los leoneses igualan al desembolso previsto por los palentinos, los segovianos o los sorianos. La factura sólo será mayor en el caso de Valladolid (196) y Burgos (190), mientras que Salamanca y Zamora serán las que más ahorren (177 y 156 euros de gasto en cada caso).
Estancamiento
Según el sondeo efectuado por la Unión de Consumidores de Castilla y León, la previsión para la comunidad supone un estancamiento del gasto –se apunta a un descenso mínimo este año, del 0,37 por ciento–. Además, se detecta un incremento en la compra online por la comodidad que ofrece a los consumidores y un adelanto de parte de estas operaciones al mes de noviembre (de alrededor del 30 por ciento) debido a ofertas en fechas señaladas como el ‘black friday’ o el ‘cyber monday’. No obstante, se advierte de que estas cifras responden a una previsión basada en un sondeo y que las finales pueden variar porque «las emociones también juegan su papel».Los comerciantes, más prudentes
Ilusión no falta en el comercio leonés, pero quienes día a día se sitúan detrás del mostrador muestran prudencia a la hora de valorar el gasto en las compras navideñas. Están de acuerdo en que se trata de una de las épocas de mayor consumo del año, pero conscientes de que para la mayoría de los ciudadanos las cosas no están para muchos excesos, no esperan grandes desembolsos. El responsable de comercio de la Federación Leonesa de Empresarios (Fele), Alfredo Martínez, se atreve a poner una cifra a este gasto, que confía en que ronde los cien euros por persona. «Tenemos mucha ilusión puesta en la Navidad y esperamos que sea buena porque el comercio lo necesita y está preparado para ello. Llevamos unos años en los que el gasto se situaba entre los 70, 80 euros, y este ojalá podamos llegar a los cien». Un aumento que reconoce, no obstante, que no es más que una «esperanza», ya que «aunque a principios de año hubo un atisbo de mejoría y parecía que las cosas marchaban mejor que otros, luego se han parado un poco». Aun así, incide en que «es Navidad, nadie se puede quedar sin regalo», por lo que cree al final esto se notará en la caja. Sobre esos 467 euros por leonés que prevé la Unión de Consumidores de Castilla y León, señala que «ya les gustaría» llegar a esa cantidad, aunque hay que tener en cuenta que en este gasto se están incluyendo muchas más cosas, como las comidas navideñas, el ocio y la diversión o el gasto en lotería que ellos no valoran. Martínez se fija más en las compras en el comercio y afirma que aunque los juguetes ocupan un hueco importante en el total de las ventas en estas fechas, el sector textil es uno de los que más destacan, y dentro de él cree que los «regalos estrella» para las fiestas serán las prendas de abrigo.
Por su parte, el presidente de la Asociación Leonesa de Comercio (Aleco), Javier Menéndez, prefiere no hablar de cifras, pero sí que reconoce que no es muy optimista respecto a la campaña navideña «simplemente porque salgo a la calle todos los días y veo lo que hay. Que esperamos, deseamos y queremos que sea buena: sí, pero el resto ya es pura imaginación». Según comenta, el pequeño comercio lucha a diario con un competidor que está disponible las 24 horas, como es internet, y a eso se suma que durante los meses de diciembre y prácticamente todo enero las grandes superficies abren todos los fines de semana, de modo que el consumo se centra más en estas dos vías y deja cada vez más de lado al pequeño comercio. No obstante, si de lo que se habla es de gasto, advierte que «con salarios en León de 700 euros al mes es muy difícil acceder al consumo en cualquiera de sus formatos. La realidad del bolsillo del leonés de a pie es la que es y sin empleos de calidad y sueldos acordes hay que hacer verdaderos malabarismos», dice.
Menéndez también hace referencia al impacto en el comercio de campañas como el ‘black friday’ y asegura que cuando se acerca la fecha «dos o tres semanas antes no se vende nada y las tres posteriores tampoco». Respecto a este año, no cree que vaya a ser peor que el anterior, sino más bien similar, y aunque las ganas por parte de los comerciantes no faltan, lamenta que «cada poco estemos desayunando con noticias que llaman poco al optimismo, porque de lo que no se da nunca cuenta la administración, cualquiera de ellas, es de que cada desgracia empresarial, de todo el tablero de la economía termina traduciéndose en un menor consumo, afectando al comercio, y mientras el resto no funcione, el comercio tampoco podrá hacerlo».