Bidasoa 28 - Ademar 29: 'Media hora de ensueño y media hora de pesadilla... con final feliz'

El Abanca Ademar salva sobre la bocina la victoria en Artaleku ante un Bidasoa que fue capaz de remontar los 9 goles que se llevaron de renta al descanso los leoneses

Jorge Alonso
19/11/2020
 Actualizado a 20/11/2020
Marchán lanza a portería ante la defensa de Bidasoa. | ARRATE MORALES
Marchán lanza a portería ante la defensa de Bidasoa. | ARRATE MORALES
Al descanso del partido en Artaleku el Abanca Ademar podía presumir de haber hecho no solo la mejor primera parte de la temporada, sino seguramente también sus mejores 30 minutos al menos desde que Manolo Cadenas regresó a León en esta tercera etapa. Porque el gol de Gonzalo previo al paso por vestuarios ponía la guinda a un inmensa primera parte en la que el Ademar fue el equipo que aspira a ser, barriendo de la pista a un Bidasoa invicto y que pese a las bajas de Racotea y Azkue mantenía argumentos para ser temible. Sin embargo, lo que ganó el equipo leonés en la primera mitad estuvo tremendamente cerca de perderlo en una horrible segunda parte en la que los irundarras fueron poco a poco mordiendo la distancia hasta el punto de empatar el partido a falta de 7 minutos y, debido a la inercia que llevaba el encuentro, dar casi por consumada la remontada con cierta facilidad al final. Pero se agarró el Abanca Ademar al partido y en un tira y afloja final estuvo más acertado el equipo leonés y salvó los puntos sobre la bocina en una nueva victoria que refrenda con el resultado un paso adelante del equipo a pesar de un susto que también debe servirle para aprender a un equipo muy joven y en formación.

Pero tiene ambición un Abanca Ademar que calcó el inicio de partido que había hecho menos de 48 horas antes en el Palacio ante el Metalurg. Un parcial de 0-3 gracias a una sensacional defensa obligó a Jacobo Cuétara a parar el partido a los 3 minutos.

Sin embargo, no consiguió cambiar nada ese tiempo muerto porque el equipo leonés firmaba los que seguramente fueron los 10 mejores minutos de la era Cadenas. Defendiendo agresivo, forzando pérdidas, corriendo cuando podía, fluido en el ataque posicional generando superioridades y lanzamientos claros e incluso marcando las diferencias a nivel individual en un abrir y cerrar de ojos Cuétara se vio obligado a gastar sus tiempos muertos para intentar parar un rodillo que a los 7 minutos ya ganaba de 6 (2-8).

No se conformó con eso el Ademar, que se creció lleno de confianza liderado por un Semedo que no paraba de lanzar cañonazos bien a Ledo, bien a Sierra, sin lograr una sola parada hasta sumar más de 15 lanzamientos en contra. La desesperación de Bidasoa se evidenció en la roja directa que vio un puntal defensivo de los vascos como Tesoriere tras un duro golpe a la cara de un Natan Suárez que ejecutó un recital de asistencias durante toda la primera mitad.

Su conexión con Marchán, un gran Gonzalo al contraataque gracias a la enorme defensa que lideró un Donlin seguramente en su mejor partido con la camiseta del Ademar así como un destacado Lucin en el uno contra uno le dieron alas a un Ademar que solo encontraba en Bidasoa la oposición de la garra de Kauldi Odriozola y Rodrigo Salinas.
No era eso suficiente para evitar los nada menos que 9 goles que se llevaba el Abanca Ademar de renta al descanso en una primera media hora inmaculada que para nada hacia presagiar lo que iba a ocurrir en la reanudación. Porque si bien era esperable la reacción de un Bidasoa que había rendido muy por debajo de su nivel habitual, los 9 goles de renta hacían imaginar que al menos los leoneses fueran capaz de gestionarla para llevarse el partido sin demasiadas complicaciones.

Nada más lejos de la realidad y es que todo lo que habían sido virtudes para unos se convirtieron en defectos que se dieron al revés en el otro lado. Fue idéntico el guión al de la primera mitad, esta vez con Kauldi haciendo un 3-0 de parcial que obligó a Cadenas a despertar a los suyos. Sin embargo, la fluidez en el ataque posicional se convirtió en continuas pérdidas y lanzamientos forzados y fallados o repelidos por un Ledo que también apareció. Además, en defensa Salinas se convirtió en un problema que no encontró respuesta en la portería ni con Slavic ni con Ghebdane y todo ello generó una espiral de nervios en un Abanca Ademar que veía como la renta desaparecía demasiado rápido.

Solo 4 goles pudo hacer el equipo leonés en 23 minutos, momento en el que Bartok hizo el 26-26 que igualaba el encuentro y abría un nuevo escenario de cara al final. Ahí volvió a encontrarse el Ademar consigo mismo para que Natan en una acción individual y Feuchtmann a la contra tras un blocaje defensivo devolvieran 2 goles de renta que, con muchos apuros y un jugador menos hasta el último minuto, sirvieron con un ápice de suerte. Matheus falló a puerta vacía el 29-29 y aún así el Ademar le dio una bola extra a los locales para sumar al menos un punto. Sin embargo, volvió a estar bien en la última acción la defensa ademarista y Bidasoa no encontró un tiro que permite al Ademar endosar la primera derrota del año a los vascos y sumar un nuevo triunfo que debe seguir marcando el punto de inflexión a un equipo que demostró ayer ser capaz de lo mejor y de lo peor.
Lo más leído