Otra vez la misma historia. Tres veces se ha celebrado de forma consecutiva la Copa Asobal en el Palacio de Deportes y las tres han repetido guión: el Ademar eliminado en semifinales y el FC Barcelona proclamándose campeón tras ganar en la final sin necesidad de sufrir a su ‘verdugo’.Y es que este domingo León volvió a coronar a la escuadra azulgrana, que se impuso por 30-25 al BM Granollers en un choque en el que los vallesanos sólo aguantaron en partido la primera mitad, poniendo tierra de por medio el FC Barcelona en los primeros compases de la segunda para llevarse un cómodo triunfo ante un rival que nunca se rindió ni bajó los brazos.
Sin embargo, eso no es suficiente para tumbar a los de ‘Pasqui’, en los que tres hombres brillaron con luz propia. Uno, el meta Gonzalo Pérez de Vargas, de nuevo sensacional y que amargó la vida a los lanzadores rivales; otro, Kiril Lazarov, que no apareció hasta el minuto 22 en el choque, siendo de hecho su sustituto en el lateral derecho Dika Mem el mejor azulgrana hasta ese instante, pero que desde su entrada en pista sacó su brazo a pasear y ‘martilleó’ una y otra vez la portería del Granollers hasta acabar con nueve tantos; y por último Víctor Tomás, protagonista y muy efectivo desde el extremo, que anotó 7 goles.
El Granollers ganaba 11-12 en el minuto 27, momento en el que el Barcelona rompió el partido con un parcial de 7-1 Ellos sobresalieron, pero fue el ‘fondo de armario’ y el ritmo constante durante los 60 minutos lo que acabó con la resistencia del Granollers, que en el minuto 27 de encuentro estaba por delante en el marcador (11-12) y soñaba con el milagro.
Pero poco le duraron las esperanzas a los vallesanos, que habían intentado sorprender de salida jugando todos los ataques sin portero, pero abandonaron su idea a los 15 minutos con 6-4 en el marcador y dos goles ya del Barcelona a portería vacía.
Porque los de Pasqui cerraban la primera mitad con un parcial de 4-1, lo que les permitía irse al descanso con dos de renta (15-13) cuando su máxima había sido tres, y comenzaban la segunda parte como un tiro, con otro parcial de 3-0 que elevaba a 7-1 el logrado entre ambas, y les permitía abrir una renta de cinco tantos (18-13) que con la diferencia entre ambas plantillas era completamente decisiva.
De hecho, tras el 19-15, ya nunca volvió a estar por debajo de los cinco goles de diferencia, no yéndose eso sí tampoco nunca el FC Barcelona por encima de los siete que logró con el 26-19 y manteniendo la cara y consiguiendo un marcador honroso el Granollers pese a poner en pista Viver ya en los últimos minutos a los menos habituales.
Tocará seguir esperando a que el Barça pinche. De momento, León vio cómo se llevaban su sexta Copa Asobal seguida.