Barbecho en las huertas por el estado de alarma

Los nubarrones llevan días sobre la provincia de León. Poca faena se ha podido hacer en el campo con unas lluvias que ahorran algún que otro riego al cereal de invierno. Las precipitaciones han impedido otras tareas como la preparación de los huertos, una faena en la que muchos leoneses ya estaban hace un año por estas fechas. Pero también les impide hacerlo las restricciones del estado de alarma. Los huertos para el autoconsumo no son un movilidad permitida a no ser que quien se ocupe de ellos sea un profesional del campo. Y es que ir a trabajar sí está permitido por el real decreto que regula la excepcionalidad de la situación que afronta el país por la crisis sanitaria del coronavirus. Su artículo 7 limita los desplazamientos de los particulares a las «actividades esenciales» entre las que no contemplan el cuidado de huertos para el autoconsumo. Esto ha motivado la petición al Gobierno de la modificación del Real Decreto del 14 de marzo por el que se regula el estado de alarma.

Este es el caso de los parlamentarios del Partido Popular de León, Carmen González-Guinda y Antonio Silván quienes han presentado tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado preguntas encaminadas a lograr una regulación de acceso a los huertos domésticos. «Estas miles de parcelas llenan todos los puntos de la geografía leonesa y suponen para las familias un importante autoabastecimiento de frutas y hortalizas. Huertos cercanos a las viviendas que están siendo desatendidos en un momento fundamental para su labranza; vitales para muchas economías familiares porque llenan despensas y congeladores para todo el año», señalaron este miércoles los ‘populares’ en un comunicado de prensa en el que lamentaron que «las condiciones actuales de confinamiento impiden a sus propietarios acceder a estos huertos». Por ello piden al Gobierno una solución «urgente» y le preguntan si tienen previsto regular los desplazamientos para atender los huertos domésticos durante el confinamiento.

Lo cierto es que a estas alturas lo que muchos harían sería preparar la tierra para una próxima sementera y lo que sí está ya plantados son los ajos. Otro caso diferente es para aquellos horticultores que para el autoconsumo cuentan también durante todo el año con producción en invernadero.

En el mismo sentido que el Partido Popular leonés se han pronunciado desde la Federación de Concejos de León, que en este caso solicita a la Junta de Castilla y León que «flexibilice el régimen de confinamiento para poder trabajar los huertos domésticos, tal y como se ha hecho en otras comunidades autónomas». «La obligación de confinamiento está afectando de forma muy severa al medio rural, donde el acceso a bienes y servicios es mucho más complicado», lamentan. En esta misma línea denuncian «la imposibilidad de poder trabajar los huertos o viñedos destinados al autoconsumo en estas fechas en las que hay una serie de tareas imprescindibles para poder garantizar las distintas cosechas, va a agravar enormemente el perjuicio económico a las familias del campo, que tienen en estos pequeños huertos una forma de abastecimiento de alimentos de la que también dependen».

Tal y como señala José Luis de la Torre, presidente de la Federación Leonesa de Entidades Locales Menores, «ahora es el momento en el que se vea la sensibilidad de los distintos gobiernos para apoyar el mundo rural, que tiene una realidad muy distinta de la urbana y que va a sufrir esta crisis de forma muy severa». «Hay que legislar atendiendo a la diversidad de nuestro territorio», concluye.

En otras comunidades autónomas, como Galicia permiten ir a recoger productos a los huertos siempre y cuando no estén a más de 500 metros de la residencia habitual. También lo permiten en Cataluña que tienen en cuenta que la parcela no se encuentre en una segunda residencia. Del otro lado están Aragón y La Rioja cuyas delegaciones del Gobierno han aclarado que no se permiten los desplazamientos a los huertos si no son una actividad profesional. Juan Laborda, técnico del Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional (Cerai) en Aragón, incidía en una «paradoja» al ser preguntado por este asunto en el Heraldo de Aragón: «Sí está permitido ir a comprar a la tienda donde te vas a encontrar con gente pero no al huerto».