Ayuntamientos y productores buscan alianzas para estirar la suelta de Torymus

Coordinados por la Mesa del Castaño, los alcaldes de los Ayuntamientos de Barjas, Balboa, Vega de Espinareda y Trabadelo, además de los de la parte de Oencia, se reunirán en el Ayuntamiento de Trabadelo el próximo sábado a las 18:00 horas con el fin de definir su implicación contra la avispilla del castaño. La pretensión es conseguir dar cuenta de los daños que la plaga puede conllevar en los próximos años y establecer una cuota de ayuda para comprar al depredador Torymus sinensis para poder, al menos, detenerla.

Las sueltas del mismo aún no han sido permitidas por el gobierno central, un paso que la mesa ha solicitado que se agilice, pero desde 2017 ya ha habido sueltas experimentales que han supuesto un beneficio para los árboles de la comarca. La Junta se ha implicado con la compra de ese depredador, aunque no ha establecido en qué medida y la pretensión de los castañicultores es incrementar esa participación con la compra propia para estirar el tratamiento.

Tres Valles invertirá en la suelta entre el 1 y 1,5% de la producción de cada uno de los asociadosDesde la Asociación de castañicultores Tres Valles su presidente, José Luis García considera que además, esa reunión con los alcaldes pretende hacer ver «una realidad» sobre el problema que se avecina, al tiempo de «mantener la ilusión por seguir cuidando los castaños pese al descenso en la producción que conocemos y que va a ir creciendo», augura. Por la parte de Tres Valles, ya han puesto «medida» a esa ayuda, que definen con respecto a sus producciones «invertiremos entre un 1 y un 1,5% de los que cada uno produzca», dijo.En ese objetivo de «mentalizar sobre lo que tenemos», García explicaque la situación es que este año no se notará demasiado en la producción la afección de la avispilla.

De hecho se esperan cantidades superiores a las últimas dos campañas, aunque apunta que algunos sotos están declarando ciertos daños por algunas nieblas registradas los pasados meses. Si el tiempo no cambia y no se produce ninguna circunstancia anómala, García prevé que se puedan recoger unas 100 toneladas de producto «un 70% de una producción normal», apunta.

Pero en los próximos cuatro años, augura un descenso notable en la misma «porque ya estamos viendo mucha avispilla», sobre todo en la zona de Moldes, Villasinde o San Julián y también en la parte de Oencia.

«En el cuarto año será una pérdida mucho mayor, pero esperemos que pueda controlarse y al quinto año el descenso no sea tan grande». Apunta que podría ser del 70% «ojalá no superáramos el 50%», apunta García.

«El objetivo es que la gente esté unida», dijo. En estos momentos, Tres Valles cuneta con 68 socios y una treintena de ellos comercializa castaña en la actualidad.
Este año se sumará a la venta de producto ecológico de la mano de uno de los socios que ha conseguido el certificado para ello, aunque deberá estar tres años a la espera de poderlo hacer como tal y mientras tendrá que proceder a destacar que está en proceso de certificado.

En cuanto a la posibilidad de abrir una cooperativa de transformación que era uno de los objetivos de la agrupación del Bierzo Oeste, ese proyecto ha sufrido un revés y se retrasará, no obstante, García mantiene la intención de mantenerlo en un futuro. En lo cercano, lo que preparan los castañicultores es la recogida «que se retrasará entre una semana y diez día», apunta el presidente de Tres Valles.

Después se iniciarán los encuentros con los magostos y las jornadas con platos realizados con castañas «que realizaremos una vez que pase Biocastanea», dice, con el fin de promocionar el uso culinario de la castaña.