Arraiza: "Aprovecharemos medidas transitorias para racionalizar el uso de los Juzgados"

Los jueces leoneses eligieron el pasado lunes a su nuevo decano. Se trata de Pablo Arraiza Jiménez, magistrado del Juzgado de Primera Instancia número 8 y de lo Mercantil, que accede al cargo en un momento marcado de manera indudable por los efectos de la pandemia en el funcionamiento de los órganos judiciales a través fundamentalmente de la suspensión de los plazos procesales durante un periodo de casi tres meses del p asado año.

Arraiza se impuso en segunda votación al otro candidato, Jaime de Lamo Rubio, titular del Juzgado de lo Social número 1 de León. Al no alcanzar ninguno de los aspirantes en primera vuelta tres quintas partes de los votos, se celebró una segunda votación en la que el nuevo decano de los jueces se impuso por once votos a nueve.

Estas elecciones llegan cuando el anterior juez decano, José Enrique García Presa, ni siquiera llevaba un año en el cargo. Había sido proclamado en 11 de junio de 2020 tomando el relevo de Luis Alberto Gómez, quien no se presentó a la reelección tras su ascenso a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias.

Ahora, García Presa ha dejado el Juzgado de Primera Instancia número 10 de León, de Familia, para pasar a desempeñar la misma labor en el número 79 de Madrid después de haberse presentado a un concurso de traslados.

En cualquier caso, Pablo Arraiza asume el Decanato de los jueces de León y lo hace marcando como su «más urgente» línea de actuación la de «tratar de contribuir a la recomposición de la convulsa situación generada por la pandemia del coronavirus en el funcionamiento de los Juzgados de León de cara a la aparente reducción de su incidencia».

En este sentido, el juez decano considera también que es necesario «aprovechar aquellas medidas que han debido implantarse con vocación transitoria para hacer posible el trabajo de los órganos judiciales durante las restricciones, pero que pueden resultar de utilidad en el desenvolvimiento futuro de las actuaciones judiciales, en particular aquellas que tienen que ver con el uso de nuevas tecnologías, para poder así salvar distancias geográficas y técnicas, y racionalizar el uso de las dependencias judiciales».

Arraiza fija además como «línea más importante» en el inicio de esta etapa la «la representación de los jueces que sirven en los Juzgados de León ante las instituciones», además de «contribuir a nivel local a la salvaguarda, dignidad e independencia de la función jurisdiccional, de la manera en que lo han hecho los decanos que han desempeñado su función en los mandatos precedentes». Además, se fija como objetivo «promover la atención de las necesidades materiales y de personal que demandan las exigentes condiciones de litigación de los Juzgados de León».

Finalmente, el nuevo juez decano se enfrenta al «desafío» que supone a su juicio «la promoción de los medios alternativos de solución de conflictos que puedan tener una mejor respuesta en el ámbito extrajudicial y además contribuyan a una utilización razonable de los recursos judiciales en beneficio de la calidad del servicio».