"Aquí el Gran Jefe Pepo"

José González es para todos ‘Pepo el del Rancho Canadá’, el último cowboy, soñador de historias del viejo oeste como las de las películas que tanto le gustan

Fulgencio Fernández y Laura Pastoriza
16/01/2016
 Actualizado a 19/09/2019
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– José, Pepo, el del Rancho... ¿Qué más?
– El vaquero, el canadiense, el soñador, el cow-boy, el del sombrero, Gran Jefe Rodilla Rota o el John Wayne de Naredo.

– El vaquero...
– Desde niño, con ocho años ya me mandaron a guardar vacas, de criado, para la montaña y era feliz allí, corriendo detrás de ellas, la naturaleza es lo mejor.

– Pero eres leonés capitalino, urbano.
– De la Plaza El Grano, allí andaba de guaje buscando entre las piedras los granos de los que bajaban de los pueblos a vender en la plaza.

– El cow-boy.

– Por el sombrero, sin sombrero no soy nada, y por las piernas torcidas, ¿nos ves que ya las tengo hechas a la forma paraque entre el caballo sin moverlas?

– Y con 13 años soldado.
– Más bien ‘cornetilla’. Es verdad, todavía no tenía catorce años cuando entré en el Ejército, fui unos meses antes para que me fueran haciendo el traje. Fui el soldado más joven de España. Estuve cuatro años, me pudieron los sueños y el afán de aventura y marché.

– Para Canadá.

– Sin prisa, primero para Francia, trabajé en la Michelín tres años. Buen sueldo, pero no era lo mío una fábrica.

– Y de ahí para Canadá, ahora sí...
– Ahora sí, qué país, qué gente, cómo aprecian la naturaleza. Allí estuve 15 años, en el campo, y con los coches que tienen los canadienses, los había por todas partes, no había más que repararlos, la chapa, y me puse a ello. Allí compré este Mustang que todavía tengo, lleva cincuenta años conmigo.

– ¿Yno llevas a Campsa detrás?
– Bueno, tampoco es para tanto pero sí hay que controlar los nervios del pie.

– ¿Y cómo llegaste hasta Naredo?
– Siempre soñé con tener un rancho, pero en León, en mi tierra. Quise hacerlo más para la montaña alta del Torío pero nadie me vendía un terreno y no se está mal en Naredo, hay terreno, naturaleza, buenas rutas para los caballos...

– ¿Cuántas películas del Oeste habrás visto en las noches del Rancho?
– Las buenas todas, las de John Wayne y todas esas, las vi unas cuántas veces, ya está la cinta estropeada. No hay cine como el western ¿conoces a alguien que no le guste?

– Sí.
– Tu no vales, que estás peor que yo.

– ¿Qué aguantas mal?
– A los guajes pegados al móvil cuando podían estar corriendo por ahí.
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