Andorra 3 - Ponferradina 0: 'El sueño de Gomes le pone en la picota'

El Andorra pasó por encima de la Deportiva a golpe del fútbol de posesión que no ha logrado implantar el técnico portugués, principal señalado tras un nuevo bandazo

J. A.
29/10/2022
 Actualizado a 29/10/2022
webponfe29102022.jpg
webponfe29102022.jpg
El ser fiel a una idea, salgan mejor o peor las cosas, suele traer beneficios a la larga. Este sábado en Andorra, la Sociedad Deportiva Ponferradina volvió a dar un nuevo bandazo que le hizo caer derrotada y quedar a merced de los puestos de descenso precisamente ante el ideal de fútbol que su entrenador, José Gomes, se planteó implantar desde su llegada a El Toralín. Sin embargo, los resultados comenzaron a no llegar por diferentes circunstancias y el portugués apostó por un «pragmatismo» que tampoco le ha dado resultados y que, ante la indeterminación en la idea y la falta de reacción, le ponen ya sin remilgos en la picota con el partido del martes en Huesca como toda una final en lo personal. También lo será en cierta forma en lo colectivo para el conjunto berciano, que dependiendo de lo que hagan Lugo e Ibiza puede caer a puestos de descenso por primera vez desde la campaña en la que recuperó la categoría.

Pero el gran señalado después de lo de ayer, a pesar de no estar en el banquillo cumpliendo su segundo y último partido de sanción, es sin duda José Gomes. Porque perdió la batalla táctica ante Éder Sarabia en un nuevo bandazo esta vez más inexplicable por el simple hecho de saber que el Andorra no iba a cambiar un ápice su forma de jugar. Le regaló la Ponferradina el balón a un equipo que solo sabe jugar teniéndolo, reforzó la defensa el conjunto berciano para hacer un día más muestra de falta de contundencia y buscó los espacios en un arma que no dio apenas ningún resultado claro.

Así las cosas, le bastaron 20 minutos al Andorra para dejar el partido encarrilado dentro de una primera parte en la que solo hubo un equipo sobre el terreno de juego. Dominó a su antojo el conjunto del principado, que encontró por la banda de Aldair – una de las muchas novedades de la Deportiva en una semana de 3 partidos – una auténtica autopista que Almpanis demostró querer aprovechar. Avisó la primera el griego, la segunda con solo 7 minutos de juego, se fue para dentro. Porque llevando el balón de lado a lado en un ejemplo de lo que seguramente quiere Gomes que la Deportiva logre algún día (si es que tiene tiempo de hacerlo), el balón llegaba a la izquierda para que el extremo pusiese el balón al punto de penalti, donde inexplicablemente con una defensa de 3 centrales y un centrocampista eminentemente defensivo, Carlos Martínez aparecía completamente solo para batir a Amir a placer.

Le tocaba volver a remar a la Deportiva desde muy pronto, pero no encontró los argumentos para intentar quitarse de encima la superioridad local. Sin saber que hacer el poco tiempo que tenía el balón e incapaz de correr al espacio de una defensa que prácticamente jugaba en campo rival, apenas lo único que le dio algo de resultado a la Ponferradina fue la presión alta.

De cualquier forma, nada capaz de igualar las fuerzas con un Andorra que, con mucho menos espacio, sí le buscaba la espalda a la zaga berciana. Un Almpanis omnipresente lo lograba con Amo cruzando demasiado su disparo, pero no cejaría en su empaño y eso le daría resultados a su equipo. Un disparo desde fuera del área del griego no lo lograba atrapar Amir, que dejaba suelto su rechace para que de nuevo Carlos Martínez se adelantase a Amo y conectase el remate para hacer el 2-0 a los 21 minutos.

Con el partido encarrilado ya, no aflojó un Andorra que siguió llegando al área blanquiazul. Jandro Orellana y Martí Vilà tuvieron opciones de dejar el partido sentenciado, pero la zaga lo evitó in extremis.

Necesitaba la Deportiva un gol que le metiera en el partido a poder ser antes del descanso, pero ni Derik en una buena acción individual ni Agus Medina con una falta desde la frontal lo consiguieron.

Pedía el partido un cambio a gritos para los bercianos en el descanso, apostando Gomes por dar entrada a Dani Ojeda y Erik Morán. Cambiaron los nombres, también lo hizo la actitud, pero no lo hizo la idea y eso dejó en entredicho cualquier opción de remontada.Cierto es que cambió la imagen berciana, que con el balón estuvo más acertada y buscó también con más ahínco la puerta rival.

Naranjo, con un disparo que se marchó por muy poco, daba alicientes para pensar en un gol que cambiase las cosas.

Nada más lejos del a realidad, porque superada la hora de juego el Andorra volvió a sentirse cómodo sobre el terreno de juego y las ocasiones volvieron a llegar para su bando. Avisaron Mika Mármol y Carlos Molina, pero la conexión de la tarde aún tenía cuerda para más. Una sensacional acción por banda de Ampanis, que volvió loco a Pascanu, permitía que el balón le llegase a un Carlos Martínez que recortaba a su defensor y le daba un pase a la red para hacer el 3-0 y un triplete personal en los que también eran sus primeros 3 goles de la liga.

Un buen resumen de una tarde para olvidar para una Ponferradina que al menos no bajó los brazos hasta el final, aunque sin premio. Lo intentó como pudo Edu Espiau, que en sus minutos se reivindicó un día más como clave para este equipo. Un pase suyo a punto estuvo de meterlo para dentro Naranjo y el propio ariete canario, desde el suelo y de espaldas a portería, no acertó a meter el balón a portería vacía tras un choque con el guardameta Ratti.

No se movería más el marcador, que deja en una situación complicada a una Ponferradina a la que le suenan las alarmas por primera vez esta temporada y que apenas tiene tiempo para pensar en ello, porque el martes llega el Huesca al Toralín y eso sí que comienza a tomar ya tintes de final... al menos para José Gomes.
Lo más leído