En pretemporada los resultados son secundarios, pero siempre ayuda ganar para crecer. No lo ha hecho todavía el Abanca Ademar en sus tres partidos de pretemporada, pero lo que sí hizo, como ante el Sporting de Portugal, fue sumar un empate (30-30) ante un equipo de nivel como el Al Ahly egipcio, que venía de ganar de 7 en Valladolid.Lo hicieron los de Cadenas tras tomarse muy en serio el partido de presentación ante su público, pues ninguno de los canteranos que no forma parte del primer equipo tuvo minutos pese a la escasez de efectivos por las numerosas ausencias.
No estaba Milosavljevic por su problema de rodilla , tampoco se vistió Kim y a los tres minutos llegó la peor noticia con diferencia del choque, la preocupante lesión de Zanas Virbauskas, que en un salto se dañó la rodilla y no volvió a salir, cojeando ostensiblemente cuando se movía en el banquillo.
Puede ser la consecuencia más determinante de un partido marcado por el ritmo trepidante que intentaban imponer los equipos y que a estas alturas de pretemporada hacía que el choque a veces fuera un correcalles; y por el apagón que se produjo a los 20 minutos, deteniendo durante cerca de media hora el choque y haciendo que se jugara a tres tiempos de 20 para despiste de una afición que se levantó para marcharse al término del segundo de ellos.
El Ademar atacó con 7 gran parte del choque. Llegó a ganar de 5 y Panos evitó la derrota sobre la bocina En él el Ademar llegó a coger cinco goles de renta, pero el Al Ahly le dio la vuelta y tuvo la victoria en su mano al final, empatando el choque Antonio Martínez a falta de 45 segundos e impidiendo la derrota sobre la bocina Panos con una gran parada.
El meta griego, sensacional, fue una de las mejores noticias que dejó un choque en el que siendo pretemporada lo que hay que rescatar son sensaciones. Y las suyas, con paradas de todos los colores, fueron espectaculares.
También las de Juan Castro, dirigiendo bien un ataque en el que Cadenas probó durante muchos minutos y con desigual fortuna a atacar con siete jugadores; las de Santista marcando diferencias en defensa y ataque, o las de su compañero en el pivote Tiago Sousa dejando buena imagen sobre todo atrás; las de un Casqueiro obligado a dar un paso adelante y acertado en la definición que siempre tiene como interrogante de su juego; o las del debutante tras dar el salto desde la cantera Darío Sanz, que cumplió y fue el avanzado cuando el Ademar probó a defender en 5-1.
¿Entres los aspectos menos positivo? Que David Fernández, con pocos minutos, parece estar muy lejos de su mejor forma. Que Deividas, con las pérdidas como perenne caballo de batalla, sigue de momento la línea del año pasado. Que Boskos sigue siendo una ‘montaña rusa’, alternando momentos de grandes lanzamientos y buenos pases, con otros de errores encadenados y precipitación. Y que Honrado, al que Cadenas sentó tras apenas 10 minutos, no tocó ningún balón y perdió la oportunidad de hacer méritos en un momento en el que hay un hueco libre en la portería.