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Adelantar por la derecha

22/04/2019
 Actualizado a 13/09/2019
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Si con el título de esta columna he captado su atención porque cree que le voy a contar cosas sobre el Reglamento General de Circulación y recordarle cómo se deben realizar determinadas maniobras cuando uno va al volante, lamento decirle que se equivoca. No tengo vocación alguna de profesor de autoescuela ni interés por entrar en la Guardia Civil y prestar servicio en la Agrupación de Tráfico a la que, dicho sea de paso, debemos agradecerle que nuestras carreteras no sean como la jungla por muchos salvajes sueltos que anden circulando por ellas.

A poco que me vaya conociendo, y si tiene en cuenta que la próxima semana cuando volvamos a citarnos en este espacio ya se habrán contado los votos, entenderá que venga a hablarle de política y me refiera a datos como el que ayer publicaba este nuestro periódico donde se asegura que Vox adelanta por la derecha al resto de partidos y podría llevarse el cuarto diputado en León. Sondeos, estadísticas, interpretaciones y encuestas pero al fin y al cabo un dibujo aproximado de lo que puede suceder el domingo por muy cocinados que estén los informes, así que tomen nota los que van a vivir los próximos años de ser diputado, senador, asesor o cualquier otra cosa derivada del color del Gobierno.

Que en las encuestas mucha gente miente más que habla no es ninguna novedad. Pero el ejemplo de Andalucía está ahí y creo que a estas alturas a nadie le sorprende que el Partido Popular vaya a perder votos por la izquierda, por el centro y por la derecha; sobre todo por la derecha heredada de Alianza Popular a la que no ha sabido mantener y, como es lógico, busca refugio en otras siglas. Lo mismo que le ocurrió al PSOE hace unos años cuando no supo gobernar para una amplia mayoría de izquierdas que votaba socialista y dejó de hacerlo porque otros concretaron mejor sus mensajes.

Después de las últimas elecciones andaluzas y de las de hace unos años en Reino Unido con las que las encuestas no dieron ni una, ni usted ni yo sabemos qué va a pasar el domingo. Lo que sí es notable es la preocupación de quienes tuvieron en sus manos cambiar la ley electoral para que el reparto siguiera siendo cosa de dos y no lo hicieron.
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