¡A romper las barreras del vino!

El Festival Estival Demencial del Bierzo trata de acercar a viticultores, bodegueros y consumidores, despejar los viejos clichés y defender la zonificación al estilo Borgoña

D.M.
28/07/2018
 Actualizado a 18/09/2019
Participantes en el Festival, que disfrutaron del vino y de la música. | L.N.C.
Participantes en el Festival, que disfrutaron del vino y de la música. | L.N.C.
Llamándose Festival Estival Demencial no podían hacer otra cosa que intentar romper barreras. Saltarse esas barreras establecidas en torno al mundo del vino o despejar los chichés de que el vino es una bebida clasista.

El Festival Estival Demencial celebrado en el castillo de los Templarios de Ponferrada durante la famosa ‘Luna de sangre’ de la noche del viernes reunió a bodegueros, viticultores, críticos especializados y aficionados al mundo del vinocon el fin de acercarse unos a otros y potenciar la puesta en valor del vino del Bierzo, permitiendo el crecimiento sostenible del sector en la Comarca.

El bodeguero Nacho León, impulsor de este evento indicó que «el vino es cultura, no es agua ni Coca-Cola. Tiene una raigambre, somos una zona productora que se ha hecho un hueco al nivel mundial. Hace 20 años era muy difícil encontrar el Bierzo en una carta de vinos de un restaurante y ahora es raro que un restaurante de una gran ciudad no tenga al menos un Bierzo.Queremos quitar esas barreras que a veces hemos tenido en la industria del vino, parece que a la gente joven nos costaba acercarnos al vino porque lo teníamos como clasista. Esto es una bebida ociosa y por eso le damos al evento un formato de festival y acompañamos las actividades con dos bandas de música».

Una de las apuestas que defendió el festival a través del bodeguero Ricardo P. Palacios es «la zonificación como cambio a la excelencia de la Denominación de Origen (DO) Bierzo». Se trata, dijo, de resaltar «el valor social, cultural y paisajístico de cada viñedo» y recuperar como marca, dentro de la DO, esos «vinos de Cacabelos, vinos de Villafranca... Eso se llegó a vender en Madrid con ese nombre. Hay cuestioneshistóricas que han hecho que las denominaciones hayan copado los nombres y se hayan ido perdiendo esos nombres de los pueblos, de los parajes, de las parcelas. Queremos recuperarlos y que cada viticultor pueda usarlos también como marca en sus vinos porque el aficionado al vino tiende a esto». Más de 200 personas hicieronla prueba el marco incomparable del castillo de los templarios.


 
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