A Jordi no me lo postean

La mi televisión se me desconfiguró, como no es de plasma. Ahora resulta que el nuestro Herrera y el nuestro Silván (Juanvi y Toño en el Húmedo)no me salen en el Parte y tengo todo el día asomados allí —¡qué falta de educación, a la hora de comer!—a Mas sin acento, a Jordi Pujol, a Oriol no sé qué y a uno que me dio una alegría porque creí que era un fichaje del Baloncesto León pero también es de la maturranga esa de la independencia...

Pues resulta que de tanto sacar a Pujol, que le cancanea la cabeza para la derecha, que se le cae y no se la postean,la mi tele le sigue a ver si entiende lo que dice y se me quedó escorada la pantalla. Que me daría igual, pero ahora en los partidos de fútbol una portería no aparece y en las tertulias de por la noche se me queda fuera Paco Marhuenda, pero como sí habla pues Farraperas lo quiere mandar a Cuarto Milenio porque parece una sicofonía que repite desde ultratumba:«España me se rompe, España me se rompe».

Y lo tenemos que arreglar ya porque la sicofonía nos recuerda a aquella vez que trajimos a Alfredo Prada, que era diputado por el tercio del alfoz (es decir, que vive en Madrid) para que nos echara el discurso de inaugurar el escudo y la bandera que habíamos recuperado para el pueblo.

Salió al balcón, al sol, que le caía la gomina como cuando vas a la hierba y se suelta el sebo con la calor, y se enfoscó en un discurso que nostenía acojonados contra la pared. «¡¡¡España se rompe!!!», tronaba desde el balcón.

Cuando ya nos íbamos a rendir salió en nuestra defensa Serafín y habló como un paisano:«¿Que España se rompe?Pues no me aparto, que usted tiene estudios, pero eso a nosotros... ¿no hay nada de lo nuestro?».

- A ver, amable lugareño, entiendo que le preocupe lo suyo, que es loable, pero es muy importante lo que les estoy diciendo, que ¡¡¡España se rompe!!!».

Por suerte Serafín no se nos vino abajo y aguantó la postura.

- Que no me aparto, que se romperá, pero lo que yo le digo es que si parte pues partirá pero no parte por este lado.

Pues eso, que vuelva la mi tele.