7.000 euros por un macho montés en Ancares

 La subasta anual de caza de la Reserva de Ancares se convierte en uno de los acontecimientos más importantes de la temporada para los municipio implicados. Se celebra de forma rotatoria entre ellos y en esta edición ha sido el Ayuntamiento de Candín el que ha acogido este sábado el acto en el que decenas de cazadores, representantes de colectivos, agencias y empresas de distintos puntos de España se personaron de forma presencial para pujar por las autorizaciones para abatir a distintas piezas a lo largo de la temporada.

El consejero de Medio Ambiente y Fomento de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, quiso respaldar elevento con su presencia y ensalzó «la caza como un elemento que es motor económico en esta zona, de gestión preocupada que permite que las subastas constituyan un recurso económico» que supone para varios de los municipios «cerca de un 30%» de sus ingresos anuales».Además, «permite controlar ejemplares, mantener el equilibrio de los ecosistema» y funciona, según dijo, como efecto multiplicador en creación de actividad económica.

Quiñones recordó que desde 2013 la Junta ha impulsado la subasta abierta vía web, en la que se han conseguido para esta reserva una puja de 7.000 euros por un macho de cabra montés, según apuntó el alcalde de Candín, José Antonio Cachón. El 10% de los pujantes en las subastas ‘on line’ son extranjeros.

El consejero señaló como dato que se han realizado desde que se abrió este plan un total de 1.267 subastas con una recaudación de más de un millón de euros para las diferentes reservas, pero este proyecto ‘on line’ «no está evitando que se produzcan las subastas presenciales».
Según indicó el alcalde de Candín, la subasta presencial logró una recaudación de 24.000 euros para los municipios por un total de 27 piezas,que deja al representante municipal «satisfecho en líneas generales». Y es que, la valía de muchas de las piezas que se cazarán esta temporada aportarán más dinero a los ayuntamientos de la reserva cuando sean abatidas por sus distintos parámetros, entre ellos, la medida.
En la subasta presencial la pieza que más valor alcanzó fue un rebeco por el que se pagarán 2.200 euros de trofeo más los puntos añadidos por las características de la pieza.

Cuatro piezas quedaron desiertas y se llevarán al portal de subastas ‘on line’ donde el alcalde tiene por seguro que se venderán a buen precio.
Además, se ha reservado una serie de lotes para los cazadores locales, que se les asignarán por sorteo a precios más bajos dentro de unas semanas.