Tal y como defendió Rancho, las tarjetas de estacionamiento para personas con discapacidad que existen actualmente se conceden a las personas con un grado de discapacidad reconocido del 33% o superior. «Sin embargo, hay un gran número de personas que, sin generar una discapacidad permanente, sufren de forma temporal una reducción en su movilidad, como consecuencia de accidentes, intervenciones quirúrgicas, enfermedades limitantes que necesitan dispositivos de asistencia como sillas de ruedas o muletas o la ayuda de terceras personas para su movilidad y que se encuentran fuera del amparo regulador con el que cuentan las personas con movilidad reducida reconocida por los organismos oficiales», explicó el portavoz de Vox.
Todos los grupos coincidieron en respaldar esta medida «con el objetivo de que no se discrimine a las personas con impedimentos de movilidad a corto plazo», y por la que Vox La Bañeza promueve que se cree un permiso de estacionamiento temporal por un periodo de hasta seis meses, ampliables hasta un máximo de 18, según lo especificado por la autoridad médica en su informe de incapacidad temporal.
Según aseguró Rancho, «esta implantación podrá resolver el problema de movilidad de los bañezanos con este tipo de incapacidad temporal, pudiéndose desplazar de manera autónoma facilitando la movilidad» y se trata de una solución pionera en este área, impulsada desde Vox La Bañeza, pero con vistas a extenderla al resto de España.
A vueltas con Protección Civil
La sesión plenaria tenía mero carácter de trámite, pero terminó durando alrededor de dos horas por la bronca entre PP y PSOE a raíz de los problemas surgidos en el seno de la agrupación de voluntarios de Protección Civil y la modificación del reglamento que regula el funcionamiento de dicho colectivo, único punto de debate en el orden del día propuesto a los grupos.
La modificación aprobada por parte de la Corporación Municipal, con los votos favorables de los nueve concejales del Partido Popular y Ciudadanos, y la abstención de los seis ediles del PSOE y del portavoz de Vox –el representante de Podemos no asistió a la sesión porque reclamó que el pleno fuera telemático alegando razones de seguridad y no se aceptó su propuesta– surge a raíz de los problemas con la agrupación de voluntarios de Protección Civil.
Estos problemas, tal y como adelantó este periódico en diversas informaciones, se deben a la falta de apoyo por parte del consistorio a la agrupación, tanto en materiales como en apoyo, así como las discrepancias surgidas con algunos voluntarios. Todo ello llevó al jefe de la agrupación a presentar su dimisión de manera formal y en dos ocasiones ante el Ayuntamiento de La Bañeza y una vez ante la Junta de Castilla y León, al no estar dispuesto a continuar al frente de la organización en estas condiciones.
Mientras el edil de Vox anunció la abstención por no haber sido informado del contenido de la modificación del reglamento, el portavoz socialista, José Miguel Palazuelo, aseguró que «estas medidas no han sido consensuadas con los verdaderos protagonistas, los voluntarios de Protección Civil, que durante el 2020 y en plena pandemia prestaron más de 9.000 horas de ayuda a los bañezanos de forma desinteresada», término que fue negado por el alcalde, Javier Carrera, quien apuntó que «las modificaciones surgen a raíz de las necesidades presentadas por el jefe de Protección Civil».
Palazuelo lamentó, además, que la agrupación «no cuente con el vehículo que se le prometió hace tiempo, por la desidia del alcalde ante la Junta, ni con material suficiente». En este sentido, el portavoz del PSOE reprochó que el consistorio «confiscara una partida de mascarillas que la Junta envió para los voluntarios», así como que «se hayan restringido las llamadas telefónicas a la agrupación» o que «se le haya retirado el ordenador con el que trabajaban y no se le hayan abonado 350 euros de combustible».