Cuarenta años más tarde, Joaquín y Esther, esos estudiantes inquietos, repasan aquella aventura en el libro ‘Ven y mira’, que se ha presentado este viernes en el Instituto Juan del Enzina de León. Compañeros de promoción, como el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, amigos y aficionados al cineclub se han dado cita para acompañar a los autores en este ‘fin del trayecto’ del que fue el gran germen de la cultura cinematográfica en el recién creado Campus de Vegazana y que queda plasmado en un libro que es un homenaje a los amigos de la juventud y a Benigno Castro, uno de los precursores de la iniciativa. Es, también, revulsivo para las nuevas generaciones, como explica Joaquín Revuelta: "Es un libro que puede arrojar bastante luz de lo que fueron aquellos años y cómo las nuevas generaciones pueden acometer esta encrucijada en la que están involucrados".
Coincide con su compañera Esther, autora del libro, en que lo importante de aquellos años fue poder estar juntos y disfrutar del mejor cine, y es lo que ha quedado plasmado en ‘Ven y mira’ que es "un homenaje a la amistad, porque para eso fuimos a la universidad, para hacer amigos; y para una generación que todavía tiene cosas que decir"
Memoria para los leoneses
Precursor fue el cineclub universitario como importante es ahora esta publicación para que aquellos años no queden almacenados en una caja de latón. Así lo ha destacado José Luis Rodríguez Zapatero, quien ha querido puntualizar lo importante que es para el futuro este libro del pasado porque habla de "memoria contemporánea, memoria de la transición, de una generación y del nacimiento de una universidad en León. Pero sobre todo de la pasión por el asombro de la cultura". El expresidente, y también exsocio del cineclub universitario, asistió a la presentación con la emoción de haber formado parte de este proyecto e invitando a que "cualquier leonés que quiera apreciar la eclosión de la cultura, debe leer este libro".
‘Ven y mira’ ya está en todas las librerías, y los recuerdos de una generación, de Esther, Joaquín y Benigno ahora forman parte de todos y buscan, como el cine de Truffaut “despertar emociones y afectos en el espectador” y el lector.