El equipo madrileño, tras dos empates en las dos últimas jornadas, recibirá a los bercianos en la quinta posición, una plaza que nadie quiere y de la que el conjunto berciano tratará de poner tierra de por medio lo antes posible.
Para ello, los blanquiazules buscarán explotar el ‘vértigo’ que parece sufrir su rival. El Sanse se ha ganado el derecho a soñar con el ‘playoff’ a pesar de no estar en las ‘quinielas’ de los elegidos, pero no está consiguiendo dar el golpe sobre la mesa que le confirme como un equipo capaz de dejar fuera de la carrera por el ascenso a alguno de los grandes favoritos.
Y es que el conjunto madrileño no ha sido capaz de tumbar a ninguno de los ‘cocos’ del Grupo I. Dos empates –ambos ante el Fuenlabrada– y tres derrotas –Atlético de Madrid B en su estadio, Real Madrid Castilla y la propia Ponferradina a domicilio– ha logrado el Sanse ante los equipos que actualmente ocupan las cuatro primeras plazas.
De hecho, el balance ante los equipos de la zona alta se completa con un empate sin goles ante la Cultural, evidencia de que si bien los madrileños son un equipo más que fiable ante equipos ‘a priori’ asequibles –la Deportiva ha visto como se le han escapado puntos ante Navalcarnero (18º), Burgos (16º) o Celta B (15º) –, en las grandes citas no acaba de encontrar su mejor versión.
Buenos recuerdos
Ante la igualdad que reina en la cabeza de la tabla, con hasta siete equipos en apenas siete puntos, el ‘goal average’ puede jugar un papel crucial ante posibles empates a final de curso.
Los bercianos llegan al segundo asalto con ventaja. En la primera vuelta, la Ponferradina se llevó los tres puntos con un contundente 3-1 que mostró a un rival peligroso y con ideas en ataque, pero demasiado permisivo en defensa.