Teruel y la Mesa

La Mesa por el Futuro por León se ha reunido en Villablino antes de ayer. Presentaron un logo, aunque nadie sabe por qué es esta la primera acción de la Mesa, ni cuánto ha costado. Además, presentaron a la coordinadora, una profesora de antropología de la Universidad de León. Carece de experiencia en el campo de la empresa o en el de la planificación estratégica, deseable para un impulso macroeconómico en León. Tampoco se sabe qué poderes tendrá la coordinadora, ni de qué fondos dispondrá.

Para llega a este punto han pasado 6 meses y varias fotos. Sin embargo, no hay resultados prácticos de la Mesa en una provincia con un cuadro económico de emergencia que tiende a empeorar. La primera interpretación del acto sugiere que la Mesa va sembrando reuniones por la provincia. No obtiene resultados, pero sí una foto al gusto de los participantes. La segunda es que carece de recursos humanos y materiales, también de predisposición, ya que nadie llevó una idea concreta o cuantificada. La tercera es que la Mesa viene a cubrir lo que, por obligación, debería haber hecho la Junta.

El protagonismo de los consejeros crea la paradoja de que la Junta tiene los recursos técnicos, económicos y humanos para hacer lo que se le encarga a la Mesa, pero no lo hace. La Junta acude a la Mesa a opinar y tampoco lleva los deberes hechos: el plan para León y las inversiones adicionales previstas. ¿A qué está jugando la Junta con su presencia en la Mesa por el Futuro de León? ¿Querrá que el futuro sea un entierro?

Pero aún más interesante es lo que aparecía en el Boletín Oficial del Estado de ayer, con número 11425. El Ministerio de Política Territorial y Función Pública decretó la concesión directa de una subvención de 30 millones de euros para la provincia de Teruel en 2020. La provincia aragonesa tiene unos 15.000 habitantes más que el Bierzo, es decir, es mucho más grande la provincia leonesa. El texto del BOE se podría trasponer punto por punto a León.

El destino de los fondos que fija el Real Decreto 868/2020 no está determinado siempre que se aplique a: infraestructuras de transporte, desarrollo e implantación de iniciativas empresariales industriales, agroalimentarias o turísticas, infraestructuras para implantar las empresas, protección y mejora del medio ambiente, desarrollar la sociedad de la información, apoyo a educación, a asistencia sanitaria, a servicios sociales, para rehabilitación y creación de bienes de contenido cultural y, finalmente, dotaciones de ocio, sociales y deportivas. Con 120 millones de euros se adaptaría a León. ¿Tienen algo que decir la Mesa o Cendón al respecto?