Según esta fuente, al menos una decena de árboles se encuentran en mal estado. Pertenecen a las especies Populus spp. y Salix spp., de medio y gran tamaño, que suelen ser «propensas a la rotura de las ramas cuando se producen fuertes vientos y nevadas». Aligi lleva denunciando esta situación desde hace cinco meses, las fuertes precipitaciones de las pasadas jornadas agravan la situación. En el estudio proporcionado por el paisajista se informa de «ramas muertas a diferentes alturas, ya quebradas o todavía ‘in situ’, con alto factor de riesgo de caída», «podredumbres que afectan partes terminales de ramas» e insectos en algunos ejemplares.Todos estos factores pueden provocar que ramas de gran tamaño se precipiten al suelo causando incluso daños personales. El problema recuerda irremediablemente al caso del menor de cuatro años fallecido el pasado marzo en El Retiro al caer sobre él un pino. El ejemplar había sido previamente revisado por técnicos del Ayuntamiento pero durante aquella jornada se llegaron a registrar vientos de hasta 70 km/h que obligaron a cerrar el parque.
En el informe proporcionado por Aligi también se recomienda la eliminación de las partes afectadas de los árboles al suponer «un factor de riesgo», agravado por el vendaval, y la corrección de algunas irregularidades en esos árboles que podrían suponer un problema en el futuro. «Además, me preocupa que, si ocurriese una desgracia, se tomen medidas extremas hacia los árboles, así como pasó este año en el parque El Retiro de Madrid donde fueron talados 800 árboles», comenta Fois en declaraciones a este medio.
Sin señales del Ayuntamiento
Según Aligi, se ha dirigido al Consistorio en numerosas ocasiones para señalar esta situación sin haber obtenido respuesta. A principios de marzo de este año, envió el informe a la oficina Parques y Jardines a la atención de Antonio Ugidos, responsable de este servicio. Tras meses sin contestación, decidió ponerse en contacto a comienzos del pasado mes tras observar que una rama de uno de los árboles denunciados se había caído. Nuevamente, sin respuesta del Consistorio. Dos días después, el 8 de junio, se puso en contacto con técnico del área de Urbanismo para que le ayudara a obtener una respuesta por parte de Parques y Jardines sobre su informe. «Se mostraron muy amables y me dijeron que contactaron personalmente con la oficina en cuestión», comenta Fois.La última semana de junio, una de las más castigadas por la climatología, el agrónomo visitó de nuevo La Candamia tras una tormentas muy intensa. «La situación estaba peor de lo que creía: dos árboles de unos 12 metros completamente tumbados al suelo y muchísimas ramas de diferente tamaño caídas al suelo o rotas y todavía colgantes de los árboles», asegura Aligi. Tras esto decidió presentar una queja en el Ayuntamiento.
Acciona, empresa concesionaria encargada del mantenimiento de parques y jardines, ha llevado a cabo tareas de limpieza en las pasadas jornadas; ha recogido ramas y hojas del suelo y cortado en trozos los dos árboles que se cayeron del todo. Los ejemplares que presentaban o que todavía presentan ramas rotas han sido delimitados con una cinta para evitar el acercamiento de los visitantes. Ha sido Fois quien ha informado de estas medidas y también alerta de que no se tiene en cuenta la altura de los árboles y la magnitud de su alcance en caso de que se cayesen. «Toda la zona alrededor de los árboles caídos y de los que están alrededor tendría que ser delimitada (teniendo en cuenta la altura para asegurar que el perímetro incluya la trayectoria de caída) por lo menos hasta que no se entienda la causa de las dos caídas y no se tomen soluciones para dar seguridad al área» ha señalado, también alerta de que «algunos de los árboles de los cuales se han caído ramas no han sido delimitados a través de la cinta de marcaje».
Esta semana otras dos violentas tormentas azotaban la provincia y dejaban su particular huella en La Candamia. Durante el fin de semana tres de los árboles que Fois había señalado como ‘peligrosos’ han caído al suelo. Estos ejemplares miden más de 15 metros por lo que su alcance puede ser importante. Acciona delimitó la zona de la caída con cinta, pero, según el paisajista, numerosos visitantes (entre los que se encontraban menores) accedieron igualmente al área. «El parque no ha sido debidamente cerrado. Tendrían que haberse asegurado mejor de que la gente no entrase», afirma Aligi.A fecha de hoy son ya entre 20 y 30 los árboles que presentan un mal estado y que pueden provocar daños.
Fois todavía no ha obtenido respuesta. Puesto en contacto este medio con el Ayuntamiento este no quiso dar más explicaciones salvo que los técnicos revisan periódicamente los árboles.