Sinfín 29 - Ademar 32: 'Panos también gana partidos'

El enorme partido del portero griego impulsa al Ademar hacia su tercer triunfo liguero en casa de un Sinfín que planteó batalla hasta el final

Jorge Alonso Macía
30/09/2022
 Actualizado a 30/09/2022
Theodoros Boskos lideró al equipo en ataque en Santander. | DIEGO GÓMEZ
Theodoros Boskos lideró al equipo en ataque en Santander. | DIEGO GÓMEZ
Venía teniendo el Abanca Ademar un grave problema en la portería desde el día en que se confirmó que Milan Bomastar no podría seguir en León. Con la llegada de su sustituto, Saeid Barkhordari, en el limbo por la burocracia, la responsabilidad única de defender la portería leonesa quedaba para un Panagiotis Papantonopoulos que, a pesar de llevar ya una temporada en León, no deja de ser un chico de 20 años sin la experiencia suficiente como para aguantar lo que supone estar en la portería de un equipo analizado por muchos ojos como es el Ademar.

Entrenando prácticamente solo, jugando con un Honrado más fuera que dentro del equipo por motivos profesionales y sin salirle las cosas desde el primer día, la bola que le impedía rendir al nivel que demostró en algunos partidos del año pasado se hacía cada vez más grande y eso repercutía en el equipo. Sin embargo, sin la presión del resultado en el tramo final del partido ante el Cisne el griego se fue soltando y este viernes en Santander, demostró ante el Sinfín que él también gana partidos.

Con 3 paradas en los 3 primeros tiros, Panos dejó claro desde el principio que iba a ser su díaPorque fue el guardameta clave en el triunfo ademarista en tierras cántabras, peleado hasta el final y con el valor añadido de hacerlo ante un equipo que aún no había perdido ante su público y, especialmente, por las bajas que se le vuelven a acumular al equipo, en este caso en la primera línea. Sin Milosavljevic y con una nueva recaída de Zanas Virbauskas, afrontó el Ademar el partido con cinco jugadores de primera línea.

Uno, el joven Miñambres, no cuenta aún para Cadenas. Otro, Kim, parece haber caído en el olvido del técnico, que no le perdona una sobre la pista. Un tercero e inesperado, David Fernández, vivió un día extraño en La Albericia, cruzado con el técnico de Valdevimbre como se pudo ver en algún tiempo muerto en el que hubo alguna voz más alta que otra y lejos de su mejor nivel a pesar de terminar sumando 4 goles y dejar alguna buena acción en defensa. Sin embargo, tiene mucho y bueno el equipo leonés en ataque. Este viernes, Juan Castro y Boskos tiraron de la primera línea ademarista, que encontró también a los pivotes de forma efectiva con dos buenos partidos de Sousa y especialmente Santista y sigue teniendo en la figura de Antonio Martínez un seguro en el extremo. Además, con Cadenas dejando de lado en el lateral zurdo muchos minutos tanto a David como a Kim, Deividas Virbauskas tuvo más minutos de lo habitual y, si bien mantuvo su inseguridad con el balón en alguna acción, aportó tanto en ataque como en defensa más de lo habitual sumando para el equipo.

Castro y Boskos se echaron el equipo a la espalda y estuvieron bien secundados por Santista y AntonioUn cóctel que le terminó dando el triunfo al Ademar, no sin sudarlo hasta el final incluso cuando el partido parecía ya decidido y sustentándolo siempre desde la portería, donde Papantonopoulos casi dobló los números de una de las parejas que mejor venía rindiendo hasta la fecha, con Mohamed Aly y Ernesto Sánchez.

Las 3 paradas de 3 lanzamientos de inicio hablaban a las claras de que este sí podía ser el día del griego, empujando a su equipo a firmar un 0-4 inicial de parcial que invitaba al optimismo. 10 minutos (3-7) tardó Rubén Garabaya en parar el partido y tratar de meter en el partido a los suyos, algo que no consiguió incluso con la diferencia de exclusiones que permitió a los locales jugar muchos minutos con un jugador más. Sin embargo, las imprecisiones tras la rotación del Ademar permitían a Sinfín liderado por un gran Ribeiro ir recortando poco a poco la renta, llegando a ponerse a un gol en el tramo final de la primera mitad. Un gol de Boskos permitía que esa renta fuera finalmente de dos goles al descanso (16-18).

Volvió a dar otro acelerón el Ademar a la salida de vestuarios, recuperando la renta de cuatro goles (21-25) conectando bien con el pivote y pudiendo correr en el atropellado ataque cántabro que le permitió robar algunos balones. No estaba ni mucho menos decidido el partido a pesar de que el Ademar llegó a estar 5 arriba (21-26) con Castro tirando del carro. Dos exclusiones innecesarias de Santista y Casqueiro abrían la esperanza de un Sinfín que se encontraría una vez más con Panos, que provocaría también la expulsión de Pla con roja directa (antes se la perdonaron a Castro en un tiro a la cara de Aly). Atacando sin portero con el partido casi ganado, a punto estuvo el Ademar de llevarse un susto que no llegó por la imprecisión del portero egipcio, dejando visto para sentencia un triunfo que debe permitir seguir creciendo a un equipo con mucho por mejorar, pero que demuestra tener la capacidad de ser competitivo y ganar partidos siempre.
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