En lo concerniente al caso concreto de la provincia de León, es preciso destacar en primer lugar que el número total de infracciones penales cometidas se ha reducido un 27% con respecto al mismo periodo del pasado ejercicio. Concretamente, la estadística refleja un total de 5.458 delitos, lo que supone una media de 30 cada día y un descenso de 2.016 en relación al dato referido a los seis primeros meses del año anterior, que se situaba en 7.474.
En cuanto a la tipología de las infracciones penales que se cometieron en la provincia entre enero y junio, cabe destacar que solo se han incrementado en la provincia los casos de homicidios dolosos y asesinatos consumados. La estadística ministerial refleja tres casos, dos de los cuales corresponden al joven dominicano que apareció sin vida con un disparo en Villavente y a la mujer propietaria de un bar que murió violentamente en su domicilio del barrio del Ejido en la capital leonesa. El tercero sería el de un hombre que perdió la vida tras recibir una paliza en el marco de una discusión de tráfico en la localidad berciana de Borrenes.
Es preciso recordar que a los tres asesinatos que contemplan los datos conocidos este miércoles se ha sumado ya en el tercer trimestre –por lo que figurará en la siguiente estadística oficial– la muerte de una mujer que fue estrangulada por su hijo en la segunda residencia que la familia poseía en la localidad de La Silva, lo que elevaría a cuatro homicidios consumados durante lo que va de año en la provincia de León.
Si se establece la comparativa con la estadística del pasado ejercicio, a lo largo del primer semestre no se consumó ningún asesinato mientras la cifra se situó en dos a lo largo de todo el año.
También se han contabilizado entre los meses de enero y junio dos homicidios o asesinatos en grado de tentativa. A estas alturas de 2019 solo se contabilizaba un intento de homicidio.
Es preciso referirse también a los denominados delitos contra la libertad y la indemnidad sexual. El balance de criminalidad refleja un total de 25, lo que representa un descenso del 45,7%% con respecto a los 46 registrados hace justamente un año. Cabe destacar que entre estos delitos sexuales cometidos el pasado semestre en la provincia de León, dos corresponden a agresiones con penetración, es decir, a violaciones. El dato contrasta con los seis delitos de este tipo contabilizados durante los seis primeros meses de 2019.
En otro orden de cosas, no ha habido secuestros en la provincia y han descendido los delitos de lesiones y riña tumultuaria, que se sitúan en 47 frente a los 74 referidos al primer semestre del pasado ejercicio. La caída es de un 36,5%.
También desciende el número de robos que se cometen en la provincia de León. Entre enero y junio se contabilizaron 384 en la provincia, lo que supone un descenso de 228 con respecto a 2019.
En este capítulo se incluyen los robos con violencia e intimidación (bajan de 97 a 50, lo que supone un 48,5% menos) y los cometidos en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (descienden también un 35,1% y pasan de 515 a 334). Dentro de estos últimos, el informe del Ministerio del Interior destaca que 204 de los 334 corresponden a robos cometidos en domicilios (en 2019 se habían contabilizado 300).
La tendencia también es a la baja en el caso de los hurtos. La provincia contabilizó un total de 1.080 delitos de este tipo durante el primer semestre de este año, lo que se traduce en un descenso del 44,5% en comparación con los 1.945 que se habían cometido en 2019.
Además, es preciso referirse a las sustracciones de vehículos (pasan de 60 a 38 con un descenso del 36,7%) y a los delitos de tráfico de drogas, que se reducen un 6,1% y pasan de los 33 del primer semestre del pasado ejercicio a los 31 del presente. El balance se completa con un capítulo que se refiere al resto de infracciones penales y que registra un total de 3.848 frente a las 4.703 del pasado año. En este caso se registra un descenso del 18,2%.