Pseudociencia

Alo largo de estos últimos días hemos sido testigos de un anuncio del Gobierno de España en el que se ataca a lo que denominan pseudociencia. Es triste, mejor dicho, muy triste ver como la ignorancia con grandes pellizcos de arrogancia ataca a las terapias complementarias. En este punto me declaro favorable a la medicina, ésta cura, pero en el lado contrario, me declaro también favorable a las terapias complementarias, ayudan a una mejor calidad de vida. Son muchos los testimonios que aseguran que algunas terapias fuera de la medicina tradicional les ha ayudado a tener una vida mejor, es una realidad a la que muchos hacen oídos sordos, las farmacéuticas tienen mucho poder y no me extrañaría nada que estuvieran presionando o manipulando a través de lobbies para hacernos ver a las terapias complementarias un enemigo público. Ahora bien, vemos a mucho charlatán que asegura curar el cáncer, el VIH y otras enfermedades crónicas de las cuales solo la medicina tiene una posible curación, empañando los beneficios de las terapias naturales y complementarias. Habría que hacer una lucha en contra de estos falsos profetas y no en contra de quienes intentan ayudar a la gente utilizando técnicas ancestrales en muchos de los casos. Si retrocedemos en el tiempo veremos la utilización de las plantas medicinales en todas las culturas como remedio de curación y sanación. Las farmacéuticas emplean estas mismas plantas para sus medicinas, siendo muchas de ellas los principios activos de las plantas en forma química. Desde la página web de AECC para la lucha contra el cáncer, podemos ver como hacen alusión a las terapias y medicinas alternativas o complementarias para ayudar a mitigar los efectos de la quimioterapia. En algunos países usan la marihuana terapéutica como solución a los efectos secundarios de algunos tratamientos médicos agresivos. La lista de los beneficios de estas terapias es larga, los testimonios más aún, pero una mano negro oculta en la sombra tiene miedo a que sus beneficios anuales disminuya. Desde aquí también le sugiero que se informe antes de acudir a una de estas terapias, del mismo modo que nos informamos antes de acudir a un médico. La mayor enfermedad, esa que lo destruye todo, se llama dinero. Aguerridos guerreros estos que nos gobiernan, dinero, dinero, dinero, por bandera, caiga quien caiga defiendan ustedes sus intereses por mucho que quieran arrebatarnos cualquier alternativa a nuestras vidas, sea salud o trabajo y la primera impere ante todo.