30/08/2019
 Actualizado a 18/09/2019
Guardar
El verano exhala su último aliento. Para la mayoría en los medios de comunicación supone el final de las vacaciones, pero para todos esos prácticos que durante el verano han estado sacando el periódico adelante es el inicio de losescasos días libres que tendrán durante este periodo estival antes de que toque volver a coger los libros.

Un sacrificio que a prácticamente todo el mundo en esta profesión le toca hacer y que supone un punto de inflexión definitivo en la perspectiva que se pueda tener del oficio.

Recuerdo que, de cada verano que pasaba en un medio de comunicación, me marchaba con la sensación de que había aprendido más en dos meses y medio largos que en todo el curso, lo cual tampoco es que diga mucho en favor de la carrera.

Era una explosión de novedades, de retos que se presentaban día a día, de dificultades a las que enfrentarte. Porque, dado que en cada sitio suele haber ‘los justos’, al menos a nivel local tu labor en poco difiere de la de los redactores ‘titulares’, siendo necesaria tu aportación para que el engranaje funcione y el medio salga adelante.

No sé si es por ello, pero esos años se te quedan. Yo, que probablemente no recuerde ya a más de un 25% de los prácticos con los que he coincidido durante mi carrera, me acuerdo a la perfección de todos aquellos con los que coincidí en mis tres veranos trabajando, así como de la gente que curraba en ese momento en los medios en los que estuve y de situaciones y consejos concretos que me dieron.

Aquí, en La Nueva Crónica, también nuestras compañeras Noemí Carpintero y Lidia Colinas terminan hoy esta particular aventura, que en el caso de la segunda era la primera experiencia laboral de su vida, aunque no lo pareciera.

Un verano entero viendo cómo es realmente por dentro la profesión. Quedándote con cosas buenas y malas, que esas también sirven y ayudan. Y ayudando a que, durante el carrusel de asientos vacíos del verano, a la hora de cierre las páginas estuvieran enviadas y la web actualizada, aunque a veces se hiciera difícil.

Sin ellas y sin el resto de prácticos, eso hubiera sido imposible aquí y en el resto de medios.Así que creo que hablo en nombre de todos diciendo: ¡Gracias!
Lo más leído