Marín cumple su promesa y reabre la ‘casa del estudiante’

Tras permanecer cuatro años cerradas, las instalaciones están de nuevo disponibles para servir de zona de estudio, punto de lectura o de acceso a internet

R. Álvarez
20/05/2016
 Actualizado a 13/09/2019
Las salas que se abrirán a los estudiantes están en la primera planta. | MAURICIO PEÑA
Las salas que se abrirán a los estudiantes están en la primera planta. | MAURICIO PEÑA
Fue una de sus promesas durante la campaña electoral y, una vez logrado el Rectorado, Juan Francisco García Marín ha cumplido. La ‘casa del estudiante’, situada en el Albéitar, abre este viernes sus puertas tras un parón de cuatro años. La vicerrectora de Estudiantes y Empleo, Ana Isabel García Pérez, y el de Responsabilidad Social, Cultura y Deportes, Isidoro Martínez Martín, harán de guías este viernes –a las 12:00 horas– durante una visita a la que se ha invitado a los medios de comunicación y que pretende mostrar las instalaciones que podrán comenzar a disfrutar desde ya los alumnos. Varias dependencias se pondrán a disposición de quienes quieran hacer de ellas un lugar de estudio, un punto de lectura o una zona donde acceder a internet a través de un puñado de ordenadores que se han instalado en una sala próxima, según señaló el rector.

García Marín se había empeñado en retomar este servicio porque, en su opinión, fue un error cerrar la ‘casa del estudiante’ y su reapertura «no era difícil». Se ha dado una mano de pintura a las estancias, se ha instalado una red wifi, se ha arreglado la iluminación, los enchufes, los baños, se han realizado reparaciones en el techo y también ha habido cambios en el mobiliario. Muchas pequeñas cosas que García Marín asegura que «eran necesarias, en las que se ha trabajado durante un par de semanas y que no han implicado mucho gasto». Al principio, el rector afirma que se valoró reabrir la ‘casa del estudiante’ «tal y como estaba» pero, tras una inspección, se dieron cuenta de que durante el tiempo que permaneció cerrada se había deteriorado, lo que hacía necesario intervenir. Las aulas que se ofrecen a los alumnos se encuentran sólo en la primera planta y García Marín considera que serán «suficientes» para atender a la posible demanda. No obstante, más adelante apunta que se podrían ampliar al piso de arriba, que ahora no se utilizará por un problema de goteras. «Hay que reparar el tejado de todo el edificio y creemos que se podrá trabajar en él en el verano», señala. Tras su puesta a punto, la ‘casa del estudiante’ permanecerá abierta de ocho de la mañana a once de la noche y contará con una persona encargada de abrir las instalaciones y cerrarlas y de vigilar que se respetan las normas.
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