Madrid estudia la situación del GRS de León ante la 'fuga' de agentes y las numerosas bajas

Se elaborarán los informes pertinentes para analizar los motivos de las bajas y estudiar qué hay detrás de las solicitudes de destino

I. Herrera
07/11/2018
 Actualizado a 19/09/2019
grs-archivo-61118.jpg
grs-archivo-61118.jpg
La Dirección General de la Guardia Civil, de la que depende directamente el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de León, se ha hecho eco de la denuncia que hacían a través de este periódico guardias del grupo asentado en La Virgen, que hablan de «dictadura encubierta» señalando que más de la mitad de la plantilla ha solicitado el traslado y se han llegado a registrar más de 35 bajas simultáneas.

No quieren hablar de investigación, pero interrogados por este medio acerca de si tenían constancia del malestar que se vive en la base leonesa, ayer, desde el Gabinete de Prensa confirmaban que se elaborarán los informes pertinentes para analizar los motivos de las bajas y estudiar qué hay detrás de las solicitudes de destino. Rechazan que se pueda concluir, por el momento, preocupación por la situación denunciada antes de que se cierren los informes, pues quieren descartar que la enorme solicitud de cambios de destino esté dentro de los parámetros de movilidad del cuerpo, aunque un 60 %, a simple vista, parezca excesivo.

Tal y como se exponía en la información publicada el pasado lunes, de los 120 guardias civiles que componen las dos secciones operativas del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil asentado en La Virgen del Camino –a los que habría que añadir la sección de apoyo (unos veinte) y la plana mayor– alrededor de 80 han solicitado el traslado, en otras palabras, irse de León. Esto supone más de un 60%. Pero además, en enero de este año llegaron a registrarse más de 35 bajas simultáneas entre el personal. Estos datos dibujan una situación que, según se han atrevido a confesar un nutrido grupo de agentes, se retrotrae a hace año y medio o dos años.

Alrededor de 80 han pedido irse, pero no todos lo han conseguido, de hecho menos de la mitad han sido los «afortunados», y les resulta casi irónico pensar que se pueda considerar fortuna marcharte de una plaza como León, con lo que cuesta llegar aquí como destino.

De acuerdo a las informaciones recogidas por este periódico, esta «dictadura» de los oficiales se ejerce a través de denegación sistemática de días libres, permisos... de hecho esto ha derivado en un repunte significativo de los recursos de alzada.

Asimismo, aseguranque son el único GRS de toda España donde hayInformes Personales de Calificación del Guardia Civil (IpecGuCi) suspensos. Acerca de estas calificaciones, desde Madrid indican que, además de estar motivados, se pueden presentar alegaciones, sin embargo, reconocen que la última palabra la tendrá el oficial al mando, es decir, los tenientes, que es a quienes acusan de ejercer presiones sobre los sargentos.
Lo más leído