Los personajes del tío Ful: Luz, cartera rural

Se confiesa feliz de ser cartera rural, y en el servicio sigue en estos días de aislamiento, echando de menos la conversación que acompaña a la carta

Fulgencio Fernández y Laura Pastoriza
04/04/2020
 Actualizado a 04/04/2020
403637457
Luz  se confiesa integrante de esa privilegiada raza de los que son felices con su trabajo y seguramente eso explica su eterna sonrisa.

Luz es cartera, «cartera rural» matiza ella, pues de los 22 años que lleva en Correos la gran mayoría, 17, son como cartera, recorriendo cada mañana los pueblos del Valle Fenar, Llanos de Alba, Alcedo... También en estos días de confinamiento pues los carteros son de los que siguen al pie del cañón, en su trabajo.

- ¿Todo sigue igual para los carteros rurales?
- No, ni mucho menos. Sigue igual porque trabajamos, pero no es lo mismo, tenemos que dejar el correo e irnos, algunos  vecinos te saludan desde la ventana, incluso te tiran un beso.
- ¿Tan especial es la relación con los carteros?
- Cuando llevas un tiempo sí;ten en cuenta que hay muchos pueblos en los que en invierno hay vecinos que en todo el día solamente nos ven al panadero y a mí. Es normal que te cuenten algo, que charles un rato, forma parte del oficio.
Y que es la parte que también se ha perdido en esta crisis, la salud manda. Ahora que la gente tiene tiempo también se podría pensar que tal vez se hayan retomado viejas costumbres, escribirse como se hizo siempre, poner la dirección a mano, el sello...
- La realidad es que no. Yo sólo he repartido una carta de ésas, con la dirección a mano y, la verdad, reconozco que te hace ilusión, porque yo ya llevo más de veinte años en el oficio y viví los tiempos de las cartas, que han pasado.
Luz, además, siempre ha tenido inquietudes artísticas, primero la fotografía y después la música, aunque sin abandonar la primera de ellas. «Durante unos años me volqué con la fotografía, en un videoblog que se llama ‘molino42’, la verdad es que me gusta mucho la fotografía pero se cruzó la música y la posibilidad de la Escuela de Música de  La Robla y me enganché, llevo siete años y voy a tres instrumentos». No sólo eso, Luz Rodríguez protagoniza otra curiosidad en esta Escuela, al coincidir como alumnos tres generaciones: su padre, ella y su hija.

Y sigue siendo la cartera que se ilusiona con una vieja carta.
Lo más leído