Los personajes de Ful: Corujo

Minero desde los 18 años, de los chamizos a La Vasco, padre de familia numerosa, inventor del video club ambulante, luchador de todas las causas...

Fulgencio Fernández y Laura Pastoriza
02/12/2017
 Actualizado a 19/09/2019
245169341
Es un personaje imprescindible en la ex cuenca minera de Matallana, como él mismo es ex minero, «aunque minero se es toda la vida, incluso sin mina». Entró en ella con 18 años, «primero en un chamizo de Vitorino en Arbas», del que asegura que «era un matadero... pero era lo que había». Silicoso, jubilado pero guerrero, sacó su carácter minero en diversas causas, como la lucha perdida contra la minicentral. «Tengo dada mucha guerra, para nada, pero hay que darla».

Se acerca Santa Bárbara y recuerda la Matallana que él conoció, pese a ser nacido en Fontún. «Cuando vine para aquí había mineros llegados de media España, los pueblos llenos, había familias mineras viviendo hasta en los pajares... No había una casa vacía».

Cuenta que aunque llegó desde La Tercia le acogieron bien en Matallana, «será porque contribuí a repoblarla, con una familia más que numerosa y dos parejas de gemelos», lo que le obligó a completar el de minero con otros oficios. «Había que echarle imaginación».

Y se la echó y tuvo el «primer videoclub ambulante». Era la época que se multiplicaban estos negocios y Corujo cargaba el maletero de su R-5 de películas y recorría los pueblos alquilándolas. «Primero pasaba con todo el muestrario, les dejaba las películas, marchaba para la mina y al salir del tajo a recoger las que había alquilado. Yal día siguiente a repetir, si no se planteaba por medio tener que ir a segar... o lo que fuera».

- ¿Y ahora?
- Cuido nietos, que es el mejor trabajo del mundo. Llevarlos a la piscina a jugar al fútbol a La Robla, a lo que haga falta.

Y el lunes, en Santa Bárbara, a contarles aquellos años...
Lo más leído