miguel-angel-cercas.jpg

Los mercados financieros en tiempos de la Covid-19

30/06/2020
 Actualizado a 30/06/2020
Guardar
Esta semana he tenido la oportunidad de seguir una entrevista que le hicieron a Juan Carlos Ureta, Presidente de Renta 4, y que se puede visualizar en Youtube.

Respecto a esta crisis que estamos padeciendo podemos interpretarla de dos maneras: como un shock externo, sobrevenido y pasajero que pasará y todo volverá a ser igual o como algo transformacional con un antes y un después. Es una transformación disruptiva con perdedores y ganadores y que viene a acelerar una serie de realidades y de tendencias que ya estaban ahí, como la digitalización.

Aunque a corto plazo hablamos de contracción económica, a largo plazo seguiremos creciendo (por población y productividad) y por eso conectemos con esas empresas y sectores que lo harán bien en el largo plazo: salud, longevidad, ocio, consumo emergente, higiene y limpieza, minería…

Esta crisis no es como la del 2008. No es solo financiera, si no que afecta a todos los segmentos de la economía real y es global, con casi la mitad de la población mundial confinada y con efectos en el consumo y en la inversión que pueden durar dos o tres años. Lo interesante es cómo se han aplicado medidas de choque nunca antes vista, tanto desde los bancos centrales inyectando liquidez como desde los gobiernos. Esperemos que estas medidas no se conviertan en permanentes pues desincentivan la adopción de medidas de fondo, distorsionan los precios del mercado y generan mucha deuda.

Desde el punto de vista de los mercados financieros, hay como tres momentos en esta crisis: marzo: donde se produce un auténtico shock, que parece el fin del mundo con caídas del 40-45%, la más rápida de la historia; una segunda fase de alivio y quizás de euforia con la intervención de los bancos centrales que inundan el mercado de liquidez y una tercera fase de análisis y reflexión. Si bien antes las cotizaciones estaban muy vinculadas por el beneficio por acción, ahora la cotización sube por la liquidez que inyectan los bancos centrales.

En este entorno de tipos de interés bajos, no existen activos sin riesgo. Por eso aprendamos a gestionar el riesgo, la volatilidad y familiaricémonos con la inversión gradual, el perfil de riesgo, la diversificación y la inversión en empresa de calidad.

Terminó este encuentro con inversores con un mensaje positivo animando a aprovechar esta oportunidad sabiendo utilizar bien tanta liquidez.
Lo más leído