León y Braganza buscan nuevos mercados para lúpulo y castaña

El órgano de asociación de ambos territorios presenta una investigación conjunta de un millón de euros, que podría ser financiada por la Unión Europea al 75%

D.L: Mirantes
06/04/2018
 Actualizado a 16/09/2019
El lúpulo es uno de los ejes principales del proyecto. | ICAL
El lúpulo es uno de los ejes principales del proyecto. | ICAL
La Asociación Europea de Cooperación Territorial (AECT) León-Braganza busca financiación para un proyecto de investigación conjunto denominado ‘Agro Economía’ que busca abrir nuevos mercados a productos agroforestales como lúpulo, castaña, almendra y nuez. En el caso del lúpulo, el cultivo más relacionado con la provincia, se buscan variedades más aromáticas para poder ganar valor comercial, como explicó este viernes el vicepresidente de la Diputación de León, Francisco Castañón. El proyecto, cuyo valor ronda el millón de euros y que podría financiar la Unión Europea (UE) al 75%, incluye también la producción de castaña, de mayor importancia para El Bierzo. Además, la investigación abarca también la producción de almendras, uno de los productos que actualmente se intenta introducir en la comarca berciana con un proyecto en marcha en Fabero. La nuez también será objeto de investigación, aunque no tiene relevancia para la provincia leonesa.

Además de la AECT León-Braganza, participan como socios las universidades de León (ULE) y Valladolid (UVA), el Centro Nacional de Competencias dos Frutos Secos de Portugal y el Instituto Politécnico de Braganza.

«Una vez que se han realizado las investigaciones, tienen que tener una transferencia a los productores con el objetivo de poner en el mercado, tanto productos de mayor calidad como posibles nuevos productos, que tenga un retorno económico por cuanto también se potenciará la búsqueda de nuevos mercados», enfatizó el vicepresidente primero de la Diputación.

Según resaltó Castañón, este proyecto se enmarca dentro de la Estrategia 2020 de la UE para ir «hacia una economía más sostenible, más preocupada por el medio ambiente, donde prime el uso de procesos naturales en los cultivos, elementos», prosiguió, que «generan nuevos oportunidades de negocio y empleo que debemos ser capaces de aprovechar».

Agro Economía tiene, como objetivo, la mejora cualitativa y cuantitativa de esos productos locales a través de una creación de valor añadido que permitan un mayor rendimiento para los productores. «Si lo logramos, podremos tener una mayor actividad económica en nuestro entorno rural, lo que puede ayudarnos a combatir la despoblación», argumentó Francisco Castañón.

Respuesta a Ciudadanos


El vicepresidente de la Diputación se refirió también a las declaraciones del presidente de Ciudadanos (Cs), Albert Rivera, que en el mitin celebrado en el pabellón de La Torre el pasado jueves atacó duramente la labor de las diputaciones en el sistema de organización del territorio en España. Castañón aseguró que las declaraciones de Rivera son fruto del «absoluto desconocimiento del mundo rural, de no conocer cómo es la gente que vive en nuestros pueblos, los problemas que tenemos». Eltambién alcalde de Pola de Gordón recordó que para conocer estos problemas «hay que vivir en los pueblos» y contraatacó recordando la abstención del diputado de Cs en el Plan de Cooperación Municipal, dotado con casi 50 millones y que se aprobó en febrero. Castañón mostrósu «indignación» por «declaraciones que pueden hacer mucho daño, sobre todo cuando provienen de un líder nacional».

La AECT contará con un técnico propio para gestionar su actividad


La Asociación Europea de Cooperación Territorial (AECT) León-Braganza recibirá un nuevo impulso con la incorporación del técnico que se encargará en exclusiva de la gestión de la actividad de la ‘alianza’. Previsiblemente se incorporará la próxima semana, liberando los recursos laborales propios de la Diputación leonesa y de la administración portuguesa que actualmente asumen la tramitación de la actividad conjunta. Cabe recordar que también se está elaborando el Plan Estratégico de la AECT, cuya redacción, financiada por la Unión Europea, fue adjudicada a principios del mes de marzo a la UTE Irma S.L.- S.P.I.
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