Las obras de arte que se 'extraviaron' de camino al Musac

Todas están en dependencias de la Junta en Valladolid y las cuatro pendientes se encuentran “en fase de revisión e inventario”, a falta del escrutinio en el resto de provincias

Ical
25/12/2021
 Actualizado a 25/12/2021
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La ubicación de 27 de las 31 piezas de la Colección de Arte Contemporáneo de Castilla y León que salieron en julio de 2017 con destino al Musac, con sede en León, desde unos almacenes privados de Salamanca y que nunca llegaron a su destino ya ha sido aclarada.

Poco después de que el hasta esta semana consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, anunciara que se convocaría un concurso público para suceder al ya exdirector del Musac Manuel Olveira, éste denunció, a finales de 2020, el ‘extravío’ de una treintena de piezas, ya que de las 291 que supuestamente habían partido de Salamanca solo 260 arribaron a León. “No se trasladaron al Musac por encontrarse en otras dependencias de la Administración de la Comunidad”, explicaba Ortega en una respuesta parlamentaria por escrito consultada por Ical.

La Resolución de 24 de mayo de 2017 ordenaba el depósito en el Musac de la Colección de Arte Contemporáneo de Castilla y León -integrada por “las obras de artistas contemporáneos de titularidad de las instituciones y entidades pertenecientes a la Administración de la Comunidad”, hasta un total de 2.000 piezas-, con el objetivo de “darle mayor difusión, mayor visibilidad y garantizar su integridad y custodia”.

Tras la denuncia de Olveira, quedó en el aire la localización de esa treintena de piezas, que fue inquirida el pasado mes de agosto al Ejecutivo regional por los procuradores socialistas José Ignacio Martín Benito, Diego Moreno, Nuria Rubio, Yolanda Sacristán, María Rodríguez Díaz, José Ignacio Ronda y Javier Campos de la Fuente, que ahora han encontrado respuesta por parte de Ortega.

“El número de obras que se trasladó al Musac fue de 260, si bien en la referida Resolución se incluyó un Anexo con un número mayor de piezas que contenía errores de transcripción y que no contemplaba los movimientos de obras más recientes a diferentes instalaciones de la Administración de la Comunidad de Castilla y León”, resumía el exconsejero.

Distribución de las piezas


Según detallaba, las dependencias de la propia Consejería de Cultura y Turismo (en el Palacio Butrón y en el Monasterio de Prado) albergan 18 de esas obras. Así sucede con creaciones de Ana Agúndez, Amable Arias, Dis Berlín, José María Herrero Gómez, Rómulo Macció, Ángel Marcos, Ángel Martínez, Mon Montoya, Pablo Martínez Pérez, José Vicente Sanz, Javier Valderas y Carlos Vega.

Por otra parte, tres se encuentran en la Consejería de Empleo e Industria (dos en su sede, realizadas por Francisco García y José Luis Rodríguez Posadas, y otra de Carlos Costa en el Edificio de Soluciones Empresariales de Arroyo), otras tantas en la Consejería de Educación (firmadas por Mateo Hernández y José María Herrero Gómez), dos en las dependencias de la calle Mieses de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades (una de Herrero Gómez y la otra de Ángel Marcos), y una más en las oficinas del Centro Cultural Miguel Delibes (realizada por Javier Valderas).

Las cuatro restantes, de acuerdo con el escrito del consejero, están “en fase de revisión e inventario”, en un proceso que prácticamente ha llegado a su término en las sedes de la Administración autonómica en Valladolid, a la espera de “la realización del inventario de las obras que se encuentren en el resto de las provincias”. Se trata de ‘Aguatintas para el Duero VI’, del soriano José María Herrero Gómez; dos fotografías del vallisoletano Ángel Marcos pertenecientes a su serie dedicada a las plazas mayores de España (las correspondientes a la Plaza de la Constitución de Mancha Real y la Grande Place de Bruselas); y ‘La voluntad del nómada’, del escultor vallisoletano Julio Mediavilla.

Ortega apuntaba que “la custodia y gestión de la colección se ha venido desarrollando mediante una doble estrategia de gestión que alternaba la valorización y difusión de dicha Colección y por tanto de los autores de éstas, así como de la creación contemporánea de la Comunidad mediante la exhibición temporal en dependencias de la Administración de la autonomía, y su custodia temporal en almacenes privados en Salamanca”.

“Esta estrategia de gestión supone un movimiento constante de las obras de la Colección, ya sea por reordenación de las obras, atención a solicitudes de exposición o cuestiones de conservación”, proseguía antes de reconocer que “la inclusión de Colección de Arte Contemporáneo de Castilla y León en la Colección Museística de Castilla y León garantiza su mejor custodia y conservación”.
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