Las históricas Sparks seleccionan en el número 31 del draft a Ángela Salvadores

Por primera vez, en un draft de la WNBA se nombró a una jugadora leonesa. Hubo que esperar hasta la tercera ronda (al contrario que en la NBA, donde si no hay traspasos por el medio cada equipo tiene dos elecciones, aquí todos cuentan con tres), pero en el puesto 31, cuando ya sólo quedaban seis jugadoras por salir, el comisario pronunció lo que ella tanto había esperado: Ángela Salvadores.

No fue elegida además por un equipo cualquiera, sino por uno de los más laureados y potentes de la mejor competición femenina de baloncesto del mundo: Los Ángeles Sparks.

Se trata del tercer equipo más laureado de la historia de la competición, puesto que suma tres anillos, algo que sólo superan con cuatro las desaparecidas Houston Comets y Minnesota Lynx, uniendo además a los títulos dos subcampeonatos.

De hecho, en las tres últimas temporadas ha estado presente en dos finales, ganando la de hace tres años y quedándose de nuevo a un paso de conseguirlo la pasada temporada, en la cual cayó en semifinales.

Sólo 5 españolas habían sido elegidas en toda la historia en el draft de la WNBA. En este lo fueron tres Después de que en toda la historia del draft sólo hubiesen sido escogidas cincojugadoras españolas (Amaya Valdemoro, Nuria Martínez, Alba Torrens, Astou Ndour y Leticia Romero), en esta última ceremonia hubo tres, pues antes de Ángela Salvadores salieron Maite Cazorla y María Conde.

Se le abre por tanto a la leonesa, que ya jugó un año en la Universidad de Duke y vivió precisamente ante EEUU uno de los mejores momentos de su carrera cuando metió 40 puntos en la final del Mundial sub’17 que perdió por sólo dos puntos España, una oportunidad inmejorable de acudir en un futuro a la NBA, donde se convertiría en la 15ª jugadora española de la historia en participar.

Para esta temporada que empezará el próximo mes, dado el tremendo nivel de las Sparks y que está volviendo a recuperar su mejor nivel en el Ensino tras estar dos meses parada, parece complicado que pueda dar el salto.

Pero en un futuro, una vez que Los Ángeles ya tiene sus derechos, parece claro que acabará teniendo esa oportunidad que todas las jugadoras de baloncesto sueñan con tener y apenas unas pocas elegidas consiguen disfrutar.

Un nuevo paso en una carrera que a sus 22 años ya tiene un palmarés envidiable.