Lácteas San Vicente: Un mundo de quesos para todo el mundo

La mayor quesería de León exporta a Estados Unidos, Israel o Marruecos

D.L. Mirantes
22/01/2017
 Actualizado a 19/09/2019
La mejora de las técnicas de producción ha sido una constante en Lácteas San Vicente, que aúna lo artesanal con la más moderna innovación tecnológica. | MAURICIO PEÑA
La mejora de las técnicas de producción ha sido una constante en Lácteas San Vicente, que aúna lo artesanal con la más moderna innovación tecnológica. | MAURICIO PEÑA
El sector agroalimentario de la provincia tiene en Lácteas San Vicente un referente industrial capaz de llevarsu producción más allá de las fronteras nacionales en una acertada estrategia para no perder posiciones ante el aumento feroz de la competencia que ha supuesto la crisis. En estos aproximadamente ocho años de parón de la actividad económica, la empresa radicada en Navatejera (Villaquilambre) no ha dejado de moverse en busca de nuevas fórmulas que garantizasen la buena marcha del negocio, fórmulas que en gran medida han pasado por la apertura al exterior. La actividad exportadora de la compañía leonesa se ha incrementado con éxito en los últimos seis años, con presencia en Israel –está certificada para producir queso ‘khoser’–, Portugal, Alemania, Francia, Italia o Marruecos y ha sido capaz de introducirse en mercados tan exigentes como el de Estados Unidos, para lo que se requiere la certificación FDA (Food and Drugs Administración). En este sentido, Lácteas San Vicente también cumple las normativa de la IFS ( Global Food Safety Initiative) que garantiza la calidad y seguridad del producto.

La empresa tiene presencia regular en las ferias más importantes como Fancy Food en Nueva York, Sial en París o Anuga en Colonia Lácteas San Vicente ha recorrido un largo camino desde su nacimiento en 1957 en Garrafe de Torío hasta convertirse en una empresa de referencia en España y con importantes reconocimientos a nivel internacional. Pese a ello, mantiene el arraigo a sus orígenes leoneses. Actualmente, la empresa familiar procura empleo a unas 60 personas de la zona y mantiene la recogida de la leche con sus propios medios a los ganaderos de la provincia, que cuentan con con buenas condiciones contractuales. No obstante, una buena parte de las explotaciones que proveen la materia prima son regentadas por los nietos de los primeros proveedores que hace décadas contribuyeron a poner los cimientos de la gran empresa que es hoy Lácteas San Vicente. La política de la empresa pasa por intentar ofrecer las mejores condiciones posibles a los ganaderos puesto que «el día que no estén dejaremos de existir», como explican los administradores de la firma, conscientes de que para mantener la calidad del producto es necesario que la materia prima también sea la mejor.

Precisamente, la calidad es una de las señas de identidad de Lácteas San Vicente. Prueba de ello son los galardones conseguidos por sus quesos en prestigiosos certámenes como los World Cheese Awards o los premios Chincho de Castilla y León. Las marcas Conde Duque y San Vicente llevan más de ocho añosdestacándose entre miles de quesos que se disputan el reconocimiento de cientos de jueces en los certámenes más exigentes. Además, las distintas producciones de la empresa integradas en un moderno complejo industrial en Navatejera cuentan con capacidad para ofrecer cada referencia en un amplio abanico de formatos que va desde los quesos de tres kilogramos hasta mitades, cuñas precortadas, barras o incluso estuches para regalo.No obstante, entre la oferta de Lácteas San Vicente se encuentran, entre otros, quesos frescos tradicionales y de larga duración; quesos de tipo manchego de leche pasteurizada de vaca, oveja y cabra; quesos ibéricos con leche cruda (semicurado, curado y viejo); quesos puros de oveja (curado y añejo); quesos de cabra (semicurado), quesos sin lactosa o quesos en aceite. Además, Lácteas San Vicente también fábrica otros productos para marcas blancas de calidad de los grandes distribuidores españoles.El "motor de la empresa"Para hacer llegar al consumidor esta extensa oferta, el área comercial, «el motor de la empresa», cuenta con músculo suficiente para alcanzar a todo el territorio nacional y al extranjero con distribuidores en cada provincia y presencia regular en las ferias de alimentación más importante como Anuga (Colonia, Alemania), Sial (París, Francia), Alimentaria (Barcelona) o ‘Fancy Food’ (Nueva York, Estados Unidos).Sus referencias se ofertan en un amplio abanico de formatos como mitades, cuñas precortadas, barras o estuches para regalos Para mantener la calidad y seguir creciendo la formación es parte fundamental de la estrategia de la empresa. Para ello cuentan con una persona encargada de actualizar los conocimientos de los trabajadores, que también reciben de forma periódica cursos específicos de empresas externas.Tradición y tecnologíaUna de las claves del éxito de Lácteas San Vicente es la combinación de tradición e innovación. En sus instalaciones de Navatajera cuenta con la última tecnología para la elaboración de los quesos con distintas líneas productivas para cada producto y con procesos automatizados supervisados en todo momento por personal cualificado.La firma controla todo el proceso desde la recogida hasta el envío de los pedidos, pasando por los secaderos, las diversas cadenas de envasado y los almacenes. Una fórmula eficaz implementada por el actual presidente de la firma, Fernando Díez Boñar, que recogió el testigo de su padre, el fundador de la empresa, Marcelo Díez, y que en 1978 apostó por el traslado de la producción a las instalaciones de su actual sede en Navatejera. Desde entonces la mejora de las técnicas de producción ha sido una constante en Lácteas San Vicente, que ha sabido aunar con éxito una elaboración artesanal con la más moderna innovación tecnológica.

Innovación para continuar creciendo

La innovación es uno de los pilares sobre los que se asienta el futuro de Lácteas San Vicente. El departamento de I+D es el responsable de hacer realidad proyectos como el de los quesos frescos de sabores (dulce de leche, chocolate y miel) que ya están en el mercado o los quesos sin lactosa.

También trabajan para alargar la duración de los quesos para crear productos como el queso fresco con una caducidad de 60 días. I+D también busca de forma constante mejora, por ejemplo, del sabor de los quesos curados.

El laboratorio de la empresa es el principal impulsor de estas ideas que en algunas ocasiones han contado también con la colaboración de otras instituciones como la Universidad de León (ULE) o laboratorios de otros puntos del territorio nacional.

No obstante, la búsqueda continua de respuestas a las necesidades de los consumidores es clave en un sector donde la competencia es cada vez mayor y se requieren soluciones más sotifisticadas y complejas para atender los diferentes gustos del público.
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