"La promoción es la clave de todo"

La presidenta del Consejo Regulador de la DO Bierzo pone el acento en la difusión de los caldos de la comarca en el 25 aniversario de la creación de este organismo

N.G. Sabugal
17/12/2014
 Actualizado a 12/09/2019
La presidenta de la Denominación de Origen Bierzo, Misericordia Bello, durante la entrevista con La Nueva Crónica. | D. A.
La presidenta de la Denominación de Origen Bierzo, Misericordia Bello, durante la entrevista con La Nueva Crónica. | D. A.
Las viñas se han adornado varias veces con recién estrenadas hojas verdes, los sarmientos que después serán cortados las sostienen como un vestido de primavera y también servirán después para acoger los racimos que son recolectados año a año. Y así hasta 25 cosechas. Son ellas las que han visto cambiar los vinos del Bierzo: desde su sabor y color hasta el diseño de sus etiquetas y todo desde unas bodegas que han pasado de ser las que no habían cambiado desde su fundación por el abuelo a otras que ahora venden en Asia.

El pasado viernes 12 se cumplía un cuarto de siglo desde la constitución oficial del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Bierzo, tomando como referencia la fecha de publicación en el Bocyl de la creación de este organismo, al que se llegó poco a poco, con el esfuerzo de cooperativas y bodegas, y como medio para agrupar fuerzas, conseguir una denominación de origen para los vinos bercianos y un instrumento de promoción para su venta.

Se ha avanzado mucho en estos 25 años. Pero aún quedan innumerables retos de futuro. Los cita, frente a una copa de mencía en una conocida vinoteca de Ponferrada, la presidenta del Consejo de la Denominación de Origen Bierzo, Misericordia Bello, que este año tomó posesión del cargo. Es la primera mujer que lo preside y la preceden otros cinco presidentes. Le queda por delante un lustro de trabajo y un objetivo primordial: impulsar la promoción de los vinos del Bierzo.

"De nada sirvemodernizar las bodegas, innovar en el producto, hacer unos diseños de etiqueta magníficos y mucho I+D+i si después nuestros vinos no se venden", enfatiza Bello.

Por eso asegura que la promoción será el principal objetivo de su mandato. "El presupuesto que tiene el Consejo es insignificante y con eso no podemos hacer promoción. La media que otros consejos dedican está entre el 40% y el 60%. Mi objetivo en estos cinco años es conseguir que al menos llegue al primero de estos porcentajes. La promoción es la clave de todo".

Pero para conseguir esto hace falta inversión. ¿Cómo obtenerla en estos años en los que la economía está casi en los huesos? Buscando ayudas externas. De esta forma, el principal proyecto en el que está trabajando ahora el Consejo Regulador es en la presentación para el próximo mes de febrero de un proyecto a tres años dirigido a la promoción de los vinos del Bierzo. Es un plan que buscará financiación a través de ayudas de la Organización Común de Mercados Agrícolas, OCM, que además ahora ha ampliado su destino a la promoción en la propia Unión Europea y también dentro del país de origen de los productos.

"Es una ayuda que ha salido nueva y había dos convocatorias: septiembre y febrero. A septiembre no hemos podido llegar con el proyecto redactado, así que lo presentaremos en febrero y en eso estamos trabajando. Además antes la OCM sólo se dirigía a los mercados de terceros países, pero ahora incluye la UE y los países de origen, porque se han dado cuenta de que no pueden volver la espalda al mercado europeo, que es importantísimo", explica Bello.

De hecho, los países europeos continúan estando entre los principales importadores de vinos del Bierzo. Sobre todo Alemania, que ocupa el primer lugar en consumo de los caldos de la comarca. Mantener estos mercados no se contradice sin embargo con realizar un mayor esfuerzo en otros. Entre ellos, la presidenta del Consejo Regulador destaca el estadounidense, que es donde quiere incidir en la difusión de los productos de las bodegas del Bierzo. "Es un mercado grande y un mercado maduro, con muchos consumidores de vino y demanda, eso sin perder de vista abrirnos a nuevos mercados", manifiesta Bello.

Las expectativas, recalca, son buenas. "Estamos vendiendo más. Este año vamos a superar las contraetiquetas del pasado porque ya en el primer semestre no sólo se cubrieron las previsiones, sino que se superaron". En este periodo, las ventas de vinos del Bierzo aumentaron en un 10%, hasta los 4,25 millones de contraetiquetas. Actualmente el 28,4% del vino que se produce se destina a la exportación, según los datos de la campaña anterior.

La participación en ferias internacionales de vino es otra de las principales estrategias para conseguir nuevos mercados y aumentar las ventas en los existentes. La primera importante en la que tendrán presencia las bodegas bercianas será Fenavin, una de las principales ferias vinícolas de nuestro país, que se celebrará en Ciudad Real en mayo del año próximo. A falta de alguna incorporación más, de momento acudirán a esta feria veinte bodegas del Bierzo.
Continuar con la modernización de las bodegas es otro de los objetivos del Consejo Regulador y de su presidenta, que anuncia que también se intentará conseguir ayudas, tanto europeas como nacionales, para mejorar las instalaciones y los equipos.

¿Y qué balance hace Bello de estos 25 años del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Bierzo? Positivo, aunque todavía haya mucho que conseguir. «Hacer una DO es un proceso largo y cuesta mucho esfuerzo. Pero el Bierzo ha pasado de ser un área vitícola a vitivinícola, de ser una comarca de producción de uva a producir grandes vinos que están en el top de los vinos del mundo», dice Bello.

La presidenta del Consejo de la DO también hace un llamamiento a recorrer el camino de la mano del resto de los consejos reguladores de la comarca. «Tenemos que seguir trabajando en la modernización y en el posicionamiento de los vinos, pero también hay que intentar vender la DO junto a otros productos, junto al paisaje del Bierzo, sus monumentos y su cultura. Contextualizar el vino y vender el Bierzo como una comarca para que no sólo se importen nuestros vinos sino para que también vengan a beberlos aquí».
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