Desde la sección de Enseñanza de CSIF señalan que los profesores trabajarán 37 horas y media en septiembre, solo que dedicarán las horas que se reduce la jornada a coordinar mejor el nuevo curso, preparar las programaciones didácticas y a la puesta en marcha de las evaluaciones iniciales. Sin embargo, desde la Federación Leonesa de Asociaciones de Madres y Padres del Alumnos (Felampa) aseguran estar "muy molestos" y creen que el hecho de que los alumnos terminen antes sus clases al mediodía ocasiona problemas de conciliación en muchas familias.
Los profesores se defienden poniendo sobre la mesa que ellos no son responsables en materia de conciliación y recuerdan que el peso de la misma recae sobre la Administración. "La Junta puede contratar monitores para esas horas en las que los alumnos no tienen clases. Nuestra labor es la enseñanza, no la de cuidar al alumnado", valora Javier Fernández como responsable educativo de CSIF.
Críticas a la consejera
Los docentes ven "interés pedagógico" en la medida, pero se desmarcan de las "lamentables declaraciones" de la consejera de Educación, Rocío Lucas, en las que calificaba de «premio» al profesorado la reducción de jornada en las primeras semanas del curso. Este horario lectivo más corto en septiembre estuvo vigente hasta el curso 2017/2018 y la Junta ha decidido recuperarlo para la próxima 'vuelta al cole' en Infantil, Primaria y Educación especial. "No es por interés personal de los profesores. Tener una hora menos de actividad presencial no implica tener una hora menos de trabajo", indica el portavoz sindical.
Las críticas a la Consejería de Educación también llegan desde las familias. Arsenio Martínez, presidente de Felampa, pide a la institución autonómica la contratación de más profesorado y elude cualquier reproche a los docentes. "Deben contratar los profesores suficientes. En Castilla y León no tenemos desarrollada la conciliación y las familias nos vemos afectadas", señala el representante de padres y madres.
En ese sentido, desde Felampa recuerdan que "no todas las familias pueden contar con los abuelos» para buscar a los alumnos al colegio. «No todos tienen abuelos y, además, no es el momento de exponerlos aunque avance la vacunación", valora Arsenio Martínez.