Javier Santamarta: "Hacer presentismo de hechos de hace 500 años es un error"

El politólogo y divulgador histórico de raíces leonesas presenta este miércoles en el Musac su último libro ‘Fake News del Imperio Español’, donde desmonta la Leyenda Negra Española y también critica la Leyenda Rosa

L.N.C.
30/11/2021
 Actualizado a 30/11/2021
El autor madrileño de raíces leonesas, Javier Santamarta, con el libro que presenta este miércoles en el Musac.
El autor madrileño de raíces leonesas, Javier Santamarta, con el libro que presenta este miércoles en el Musac.
Politólogo y periodista nacido en el barrio de Chamberí en Madrid, tiene raíces netamente leonesas. Comenzó como periodista en un periódico de Alicante; pero inquieto él, comenzó a estudiar Derecho e Historia, aunque se haya colegiado como politólogo. También es bastante aventurero, ya que pasó años en labores de Ayuda Humanitaria en varios conflictos internacionales. Animal de radio, ahora mismo tiene sección propia en esRadio sobre Historia, en Gestiona Radio sobre Literatura, y en Onda Cero y Onda Madrid es uno de los invitados habituales. Como colaborador en el diario ‘Vozpópuli’, ha escrito durante años sobre costumbrismo, arte, libros… y, sobre todo, acerca de la Historia de España. Además mantiene su propio blog en ABC: ‘Notas del Espía Mayor’. Sus anteriores libros de temática divulgativa histórica fueron ‘Siempre tuvimos héroes’ y ‘Siempre estuvieron ellas’ han tenido gran éxito consiguiendo varias ediciones. . En esta entrevista habla de la Leyenda Negra que tanto sufre España y también critica la Leyenda Rosa que intenta combatirla. «La Historia ha de contarse como és, lo bueno y lo malo, pero con rigor; no con mitos, cuentos y equivocaciones conscientes, porque si no las intenciones del divulgador serán poco honradas», deja claro.  

– ¿Por qué escribir sobre las ‘Fake News’ de España?
– Porque está claro que cada día hay más interés por la Historia de España, pero sin embargo nos encontramos con que sigue plagada de tópicos, de bulos y de patrañas que hacen mucho daño para quienes se acercan a ella. Es bueno poder plasmarlos y dejarlos reflejado en un libro. Al menos los más relevantes.

– ¿Por qué los españoles nos creemos la Leyenda Negra de otros y rechazamos la historia rigurosa de nuestro país?
– Por un cierto complejo de inferioridad que no casa mucho con la imagen de un pueblo orgulloso con la que nos ven desde otros países, y que hemos abandonado en general para creernos que otras naciones han sido más ricas, más estables, y con una Historia de la que no acomplejarse. Lo que es absolutamente falso. Pero es lo que solemos creer en general.

– ¿Cuánto daño nos ha hecho... y nos hace hoy la leyenda negra?
– En su momento no dejaba de ser mera propaganda de combate y lucha contra la Monarquía Hispánica, contra el Imperio español, el más poderoso de su época. Mucha de esa propaganda se ha quedado anclada en el subconsciente de muchos, tanto extranjeros como nacionales, sobre hechos como el supuesto genocidio en América, la terrible Inquisición española, y la incapacidad patria en materia de ciencia y tecnología. Lo que sería más que matizable… ¡Y discutible!

– ¿Y la Leyenda Rosa? Porque tampoco es buena. ¿La criticas también?
– La Leyenda Rosa o Aurea es perniciosa porque tampoco permite ver lo que fueron hechos del pasado con objetividad. En cada época las ideas y los conceptos sobre ciertos aspectos, eran muy diferentes a los que podamos tener ahora. Hacer presentismo y mirar con los ojos del siglo XXI hechos de hace 300 o 500 años, es un error. Pero cualquier crítica lo que tiene que tener es un componente de veracidad, y no usar sólo la parte que nos interese sobre un hecho. Que tendrá seguramente luces y sombras. Pero si sólo vemos unas u otras, estaremos cayendo en el mismo error.

– ¿Cuáles son las mentiras más gordas sobre España?
– La primera casi la inexistencia del propio concepto de España. Se está confundiendo mucho lo que es la nación, el Estado, y lo que es una idea que, sobre una base geográfica, va a ir construyendo una realidad histórica que va a devenir en lo que hoy conocemos como España. Pero también está el manido y falso genocidio en América. Está claro que una conquista no se hace regalando caramelos. Pero jamás hubo un intento de eliminación sistemática y organizada de los nativos de aquellas tierras. Todo lo contrario. Aunque es un hecho la propagación involuntaria de las enfermedades que las diezmaron. Pero también lo son las Leyes de protección o los decretos de mestizaje.

–¿Qué opinas de la historia independentista mentirosa pagada con dinero público para robarle a España lo bueno y desprestigiarla?
– Cualquier nación se ha querido fundamentar en mitos y leyendas. Es normal. Pero no estamos en tiempos pretéritos ni en ese siglo XIX donde la Historia de los pueblos y naciones quería convertir en irrefutable lo que podía ser interpretable. Ahora ese nacionalismo hilarante acaba convirtiéndose en algo bufo donde cualquier cosa va a ser tomada para dar una imagen falsa para afianzar una idea preconcebida. Lo peor, bien cierto, es que todo ello se está pagando con dinero público. De traca.

–Hay un debate constante al que te refieres en el libro, aunque parezca bastante tonto. ¿España desde cuándo existe? ¿Desde los romanos, en la Edad Media, con los Reyes Católicos o con la construcción nacional de La Pepa en 1812? ¿No es estéril la discusión?
– En cierta medida lo es. Pero es lógico que la gente quiera saber sobre sus orígenes. Sobre los de su nación o su patria. Y España es un proceso de siglos marcado desde el principio por su realidad geográfica: la península ibérica, conocida por Roma como, Hispania. De ahí derivará su nombre, y sobre la base peninsular se establecerá el reino visigodo, será invadida por los musulmanes, y surgirá el hecho de la restitución por esa llamada pérdida de España. Una España de reinos cristianos y de taifas musulmanas. Unos reinos que se irán uniendo como territorios propiedad de los diferentes monarcas, pero con una fuerte tradición de contrapoderes. Todo acabará formalmente como nación española en 1812, cierto. Pero es un constructo y un concepto de siglos, dependiendo en cada momento de la época que se viva.

–¿Cuántos periodistas o divulgadores de Historia están todavía dando más importancia a los bulos o leyendas falsas?
– ¡Pues sorprendentemente más de los que se pueda imaginar! Y no sólo periodistas o divulgadores. Graduados en Historia que siguen queriendo ver e incidir en las partes más negativas que hayan ocurrido, llegando a convertir cualquier atrocidad posible en categoría, y dejando de lado la historia de tantísimos personajes interesantes de los que enorgullecerse o tomar como referentes.

–¿Qué pretendes entonces con el libro? Vamos, qué es en realidad lo que quisieras que ocurriera con el lector una vez lo haya terminado.
– Que se preguntara cosas. Que pusiera temas en entredicho. Que le haya podido provocar curiosidad por conocer y saber más de nuestra Historia. Y, sobre todo, que haya pasado un buen rato leyéndolo.

–¿Qué opinas de Twitter y las Redes Sociales, los Youtuber y Twitch? Hay muchos divulgadores interesantes y buenos. ¿Es un buen método para dar a conocer la Historia rigurosa de España y lo que hizo en el mundo? ¿A cuáles recomendarías?
– Las Redes Sociales, o los canales de Youtube y Twitch pueden ser como todo: magníficas herramientas para construir… y para destruir. Nunca hemos tenido más al alcance la información, y por eso nunca antes había sido tan peligrosa. Pueden ser buenos medios para crear, sobre todo, curiosidad sobre ciertos temas y épocas. Algunos de mis favoritos en Twitter son las cuentas, que muchos cuentan además con blogs, de El Reto Histórico, César o Nada, La Armada Invencible, El Trastero de la Historia o Darío Madrid. En cuanto a YouTube, sin duda recomiendo el canal de Academia Play, que cuenta además con magníficos libros publicados. En Tik Tok tenemos a Alfred Lopez, conocido como «Ya está aquí el listo que todo lo sabe», que es muy divertido y cuenta muchas curiosidades variadas.

–Eres de familia leonesa. ¿De dónde?  
– Pues mis abuelos eran enemigos ‘irreconciliables’ (se ríe por la ironía), pues uno era de la Montaña, de la Magdalena, y otro de la Ribera del Órbigo, de La Milla. Y mi infancia fue triscar por lugares como Cistierna, y visitas a las increíbles vidrieras de la Catedral de León. Con lo que llevo León muy dentro de mí. De mis recuerdos. Y de un respeto importantísimo por su Historia. Cuanto más conozcamos (¡y mejor!) nuestra Historia, por supuesto que podremos combatir con éxito los bulos y patrañas negrolegendarias.

–En León estamos todos muy enfadados con que el Reino de León sea el gran olvidado de la Historia de España? ¿No le parece alucinante que desaparezcan tres siglos de nuestra historia, o que lo despachen con dos líneas y ya?
– Creo que cada vez más la olvidada es toda la Historia de España. Lamentablemente. León es uno de esos territorios que los reyes desmembran entre sus hijos, lo que no ayudó a que se consolidara de manera efectiva como el reino peninsular principal. Y entre unas cosas y otras, acabó, como comentamos, relegado a un segundo injusto plano.

–¿Cuáles son para ti los personajes más importantes de la Historia que vivieron en lo que es la Región Leonesa?  
– Voy a quedarme con uno que es poco conocido y que debería de estar su conocimiento, financiado por el propio Ministerio de Igualdad: el de la reina Urraca de León. Primera reina propietaria de un territorio de esta importancia, habida en Europa. Por entendernos, una reina con pleno poder ejecutivo. Una mujer admirable a la que se tendría que tener de ejemplo de empoderamiento real ¡y nunca mejor dicho!

–¿Qué opinas del Fuero de León de 1017 y las Cortes de León de 1188? ¿Son tan cruciales para la Historia del Derecho Europeo y mundial como creemos los leoneses?
– Lo son. Las Cortes de León llevan reconocidas por la Unesco desde 2013 como el Parlamento más antiguo de Europa (que es casi como decir del mundo), donde hubo representantes de todo tipo. No sólo aristócratas o miembros de la Iglesia. A mí se me llevaron los diablos cuando vi la poca trascedencia que en 1988 se dio al centenario aniversario. No se supo nada de ello en el resto de España, y aún hoy en día hay quien niega la importancia que tuvieron las instituciones y legislación leonesas.
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