Javier Castaño: "Otra vez a ganarme el sitio"

El torero leonés Javier Castaño inicia este domingo por la tarde en la plaza de las Ventas de Madrid una nueva temporada. La Feria de San Isidro es su primera cita de 2017 y tiene puestas muchas esperanzas enesta cita en la que hará el paseíllo con Fernando Robleño y José Carlos Venegas. «Ya se sabe que Madrid es el mejor escaparate, el lugar que te puede abrirpuertas y contratos, y tengo muchas esperanzas en esta primera corrida, en que sea un buen lote y pueda sacar lo que yo se que llevo dentro».

Toreará Castaño toros de Hijos de Celestino Cuadri y aunque llega sin haber toreado ninguna corrida esta temporada señala que «el invierno ha sido bueno, he entrenado mucho y me he encontrado muy bien, por eso voy a Madrid confiado y con muchas ganas de que llegue el momento de la verdad».

Está iniciando Javier Castaño una nueva etapa en su carrera. La temporada pasada sufrió el duro trago de superar un cáncer de testículos, que ya ha superado y se siente nuevamente en ‘la puerta de salida’ de su carrera. Ya han pasado muchos años desde que tomó la alternativa en San Sebastián en el año 2001 compartiendo cartel con Enrique Ponce y ‘El Juli’, unos meses después de haber abierto la puerta grande de la plaza de Madrid como novillero, el 23 de mayo del año 2000. Entonces el recordado crítico Joaquín Vidal escribió en El País: «Bien servido iba Javier Castaño, que emocionó con su entrega y en diversos pasajes de sus faenas puso al público en pie. Así viene un torero a Madrid. No como otros».

Después el torero leonés ha tenido de todo en su carrera. Primero fue esperado con la expectación que despierta quien ha abierto la puerta grande en Las Ventas, pasó después un calvario de olvido, se rehizo, llegó la enfermedad... pero siempre ha dado la cara, hasta el punto de convertirse en un especialista en las llamadas corridas duras, de las ganaderías más temidas, siendo uno de los toreros que se ha enfrentado a más miuras. «No tengo muchas corridas firmadas, pero es mi sino, tengo que ir abriendo las puertas en cada una de las plazas en las que hago el paseíllo, ya no me preocupa, sé que me la tengo que jugar cada tarde y hoy en Madrid volveré a hacerlo».

No desvela Castaño si tiene preparado algo especial para Madrid, como el año que sacó la silla. «Esas cosas salen sobre la marcha, lo importante es que los toros te den pie a imaginar».