Javier Bermejo: "Comparto experiencias vitales con mi personaje"

El actor leonés regresa un año después al Auditorio Ciudad de León con la adaptación de la obra de Valle Inclán ‘Divinas palabras’ en un montaje coproducido por Producciones Faraute y el Centro Dramático Nacional bajo la dirección de José Carlos Plaza

Joaquín Revuelta
22/10/2020
 Actualizado a 22/10/2020
La miseria humana y la podredumbre moral están presentes en la obra del dramaturgo, poeta y novelista gallego.
La miseria humana y la podredumbre moral están presentes en la obra del dramaturgo, poeta y novelista gallego.
Casi un año y medio después de su última actuación en el Auditorio Ciudad de León con la representación de la obra ‘Auto de los inocentes’, el actor leonés Javier Bermejo regresa con una coproducción entre Producciones Faraute y el Centro Dramático Nacional como es esta adaptación de ‘Divinas palabras’ de Valle Inclán que vuelve a contar en la dirección con José Carlos Plaza y que se representa en única función a las 20:30 horas con el aforo limitado a 300 personas. Una situación muy diferente a la vivida por el joven intérprete facundino el pasado 22 de mayo de 2019 dando vida a un refugiado. Justo en las fechas en que Bermejo acudía a León con el ‘Auto de los inocentes’ estrenaba el montaje de ‘Divinas palabras’, al que accedió esta vez sin necesidad de tener que someterse a un casting como en el caso anterior. «Para el ‘Auto’ hice un casting porque uno de los estrechos colaboradores de José Carlos Plaza fue mi profesor cuando estudiaba en Valladolid y ahora mismo compartimos cartel en ‘Divinas palabras’. Como José Carlos Plaza me había dirigido en el montaje anterior me llamó directamente para participar en la adaptación de la obra de Valle Inclán», recuerda Bermejo, que lleva más de un año con esta representación cuya hoja de ruta se ha visto alterada como consecuencia de la crisis sanitaria. «Con la obra llevamos más de un año pero la pandemia nos ha marcado mucho», reconoce el actor leonés, que en esta ocasión comparte escenario con Alberto Berzal, María Heredia, Chema León, Carlos Martínez-Abarca, Montse Peidro, Olga Rodríguez, José Luis Santar, Jorge Torres, Consuelo Trujillo y Rocío Vidal. «Estuvimos alrededor de un mes en el Teatro María Guerrero de Madrid e hicimos parte de la gira antes del confinamiento en el mes de marzo con algo más de cuarenta funciones. Ahora hemos superado ya las cincuenta intentando retomar todo lo que no se hizo desde marzo, pero evidentemente también ha habido cancelaciones, cambio de fechas y ciertamente estamos un poco locos con tanto cambio», confiesa Bermejo, que en circunstancias normales presumiblemente hubiera finalizado la gira antes del verano pero ahora tienen funciones apalabradas hasta marzo del próximo año.

Javier Bermejo comenta que antes de la pandemia en todas las representaciones de ‘Divinas palabras’ habían colgado el cartel de ‘no hay billetes’, tanto en Madrid como en la gira posterior en grandes teatros y auditorios. «Personalmente lo noto más desangelado, quizás más frío, pero contrariamente a eso ocurre una cosa y es que el público necesita hacerse notar más que antes porque son menos y es muy curioso cómo al final de la función los aplausos o la manera de ponerse en pie de la gente es como diciendo: estamos aquí presentes, hemos compartido con vosotros estas dos horas de función. Es algo que he percibido desde el escenario», sostiene el actor de Sahagún, para quien la pandemia también ha afectado a la convivencia entre los diferentes integrantes de la compañía. «Estamos en una situación tan excepcional que se supone que el comportamiento individual de cada uno nos va a afectar a todos. Por ahora no hemos tenido ningún problema en cuanto a actores, técnicos y demás, pero tenemos que ser realistas y es algo que puede suceder en cualquier momento. En mi caso intento cuidarme lo máximo posible y el resto de compañeros lo mismo porque el pan mío depende de el de al lado y el pan de el de al lado depende igualmente de mi comportamiento. Todo ello desde la máxima responsabilidad, pero también intentando vivir, porque si no morimos en el intento, morimos de miedo o morimos por la incidencia del Covid-19». Preguntado por la lectura actual que se puede hacer de la obra de Valle Inclán, el actor facundino asegura que tratándose de un autor universal la obra está de plena actualidad. «Nos sigue hablando de la miseria humana, de la podredumbre moral que tenemos encima, nos sigue hablando de que en cuanto los políticos o quienes sean nos hablan ‘en latín’, por decirlo de alguna manera, nos quedamos como embobados y nos engañan con una facilidad pasmosa. La obra es muy diferente al ‘Auto de los inocentes’ porque este último no dejaba de ser una excusa para representar la primera obra escrita en castellano», reconoce Bermejo, cuyo paso por el ‘Auto’ significó un paso adelante en su carrera «por trabajar en la Compañía Nacional de Teatro Clásico y con un director como José Carlos Plaza, que a su juicio es uno de los mejores de España. «Pero entrar en ‘Divinas palabras’ ha sido todavía más emocionante, porque trabajar por segunda vez con un director es muy positivo para un actor porque te da confianza para seguir».Javier Bermejo juega ya en otra división, pero eso no quita que mantenga su vinculación con la realidad escénica local. «Cuando sales de León claro que notas que juegas en otra división, pero yo no quiero dejar mi ciudad, sigo haciendo cosas con los grupos de León. Igual que cuando te vas de gira a este nivel notas diferencias, cuando me voy por ahí con los grupos de León también necesito ese día a día y afrontar todo desde el trabajo real, que es montar, desmontar, actuar. Eso lo sigo echando de menos y no lo quiero dejar nunca», asegura el actor de Sahagún, que no tiene preferencias a la hora de abordar el repertorio del teatro clásico o hacerlo con obras de autores contemporáneos. «Yo a Valle Inclán realmente lo he descubierto ahora con ‘Divinas palabras’. En verdad es un maestro y te descubre todo. Me he enamorado del teatro de Valle Inclán, pero me gusta todo. De hecho sigo con Teatro Corsario en una obra de José Zorrilla y me encanta hacer esa función. Pero también me gustan los textos actuales. No te puedo decir que me encuentre incómodo ni con un texto contemporáneo ni con el verso. No veo mayor dificultad con ninguno de los dos porque en definitiva me gusta el teatro».

Hasta marzo del próximo año seguirá de gira con ‘Divinas palabras’, pero el intérprete facundino tiene proyectos de futuro, aunque ahora todo viene condicionado por la evolución de la pandemia. «Existe alguna posibilidad de que Carmelo Gómez y yo trabajemos juntos. Es algo que se está gestando aunque necesita tiempo y es algo que me ilusiona muchísimo porque admiro su trabajo y lo sigo desde niño», asegura Bermejo, que entre las diferentes opciones que barajan está la de que Carmelo lo dirija.

De cine está a la espera del estreno de ‘Claret’, donde tiene un pequeño papel que le permitió volver a colaborar con el mismo equipo de ‘Poveda’. «Me llamaron para otro rodaje, pero no lo he podido compaginar con las fechas de la gira de ‘Divinas palabras’», reconoce Bermejo, al que le hace una enorme ilusión poder volver este jueves al Auditorio Ciudad de León para volver a actuar ante su gente. «Me hace muchísima ilusión volver a León y va a ser una función muy especial. También me pilla en un momento delicado porque a nivel personal es mi peor momento, tras el fallecimiento de mi madre, pero a nivel profesional es el mejor. Con este personaje de ‘Divinas palabras’ curiosamente comparto experiencias vitales y como dice Carmelo a veces hay que preguntarse por qué un personaje te elige a ti en ese momento de su vida. Y yo ahora vamos, la verdad es que es muy potente lo que le ocurre al personaje en la obra y lo que me ha ocurrido a mí a nivel personal. Va a ser una función más que especial. Quizás sea la más especial que yo he tenido en León, segurísimo», concluye.
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