Las temperaturas han bajado considerablemente en los últimos días, por lo que las heladas y el frío intenso pueden presentarse de un momento a otro. Algo que afecta directamente a los cultivos, pudiendo causar verdaderos estragos y pérdidas muy cuantiosas. Por eso, ahora es el momento de utilizar todas las soluciones posibles con las que puedes evitar los daños.
Hay diferentes materiales con los que luchar contra las heladas y el frío. Un buen ejemplo son las mantas térmicas, con las que mantener la temperatura y evitar las consecuencias indeseadas de los fenómenos atmosféricos más adversos. Pero, si hay un artículo que destaca sobre los demás por su efectividad y precio, ese es el plástico para invernadero de siempre.
Aplicaciones del plástico para invernadero
Estos plásticos que se llevan utilizando en la agricultura desde hace décadas no solo sirven para cubrir techos y paredes, sino también para controlar la temperatura, regular la humedad y proteger de los rayos del sol al tiempo que distribuyen la luz. También sirven para reducir la evaporación y proteger contra plagas y diferentes enfermedades.
Así que, si quieres proteger tus cultivos, lo mejor es utilizar plásticos para invernadero de calidad. Ya sea que tengas cultivos verticales, hidropónicos o tradicionales, este tipo de plásticos es resistente y ofrece una gran durabilidad. Eso sí, deben estar bien colocados y sujetos firmemente al suelo para resistir ráfagas de viento y ejercer su función de manera correcta.
Cubriendo tus cultivos con plástico para invernadero, estarás asegurándote su supervivencia. Eso sí, una vez hayan pasado las heladas y el mal tiempo, es conveniente retirarlo para permitir que las plantas respiren. Sabiendo esto, tus cultivos estarán a salvo del frío del invierno y de cualquier otro daño por heladas, granizos o lluvias torrenciales.
Consejos prácticos contra las heladas
Sabiendo que el plástico para invernadero es la mejor solución para proteger tus cultivos durante el invierno, no está de más que conozcas también otras formas de evitar daños a tus plantas. A continuación, se detallan las principales soluciones más efectivas para proteger todo tipo de cultivos y plantas de las condiciones más adversas:
- Mantas térmicas. Este tipo de producto es capaz de crear un ambiente más cálido alrededor de tus cultivos, de forma que el frío de los meses de invierno no les afecta. Lo mismo ocurre con las fundas y mantos de hibernación, así como las mallas antiheladas.
- Riego adecuado. Para que las raíces puedan soportar mejor las bajas temperaturas, es conveniente que riegues tus cultivos durante el día para que las raíces estén bien hidratadas. Es la mejor manera de cuidar tus plantas durante el invierno.
- Poda. Es conveniente podar tus cultivos antes de la llegada del invierno. De esta forma estarás reduciendo la cantidad de follaje que pudiera quedar expuesto a las heladas y así conseguirás minimizar sus efectos adversos.
- Utilización de mantillo. Agregar mantillo en la base de las plantas también ayuda a proteger las raíces y retener el calor, al igual que las mantas térmicas y los plásticos para invernadero; aunque estas últimas soluciones son mucho más efectivas.
Cómo colocar el plástico en tus cultivos
Los plásticos para invernadero son una forma económica y muy efectiva de proteger tus cultivos frente a las heladas y el frío del invierno. Pero no solo eso, también sirve de protección contra plagas, pájaros y todo tipo de fenómenos atmosféricos. Ahora bien, es importante que sepas cómo transportar, almacenar e instalar este material.
En primer lugar, durante el transporte debes evitar arrastrar las bobinas para no dañarlas y colocarlas sobre superficies lisas. Tampoco es buena idea apoyar encima de las bobinas de plásticos objetos punzantes o pesados. En segundo lugar, antes de proceder a la instalación, conviene que revises si hay estructuras dañadas y oxidadas que pudieran dañar el plástico.
Una vez descartados o solucionados dichos inconvenientes, ten en cuenta que los plásticos para invernadero llevan indicada su cara interna para que puedas instalarlos correctamente. A la hora de colocar el plástico sobre la estructura, lo más conveniente es desplegarlo cuidadosamente para evitar pliegues y extenderlo de manera uniforme sobre una superficie plana.
A partir de ahí, debes asegurar un extremo del plástico a la estructura que previamente hayas confeccionado, mediante alambres especiales, grapa o clips. Otro paso importante es fijar los bordes del plástico a la base de la estructura mediante rieles o perfiles o enterrando parte del plástico en una zanja poco profunda. Eso sí, sin forzarlo demasiado para evitar que se rompa.
Es importante también colocar sellos de goma o burletes en las uniones. De esta manera evitarás que el viento o la lluvia desestabilicen el invernadero o lleguen a entrar en él. En resumen, para proteger tus cultivos del frío y las heladas, los plásticos para invernadero son la mejor opción. Lo importante es adquirirlos de una empresa con experiencia en el sector que ofrezca productos de máxima calidad y una buena atención al cliente.