El redescubrimiento del paisaje en Antonio Guerra

Últimos días para visitar la exposición ‘Horizonte de sucesos’ que el artista zamorano afincado en León ofrece en la sala Provincia del Instituto Leonés de Cultura, cuyo último día de apertura al público es el próximo sábado 31 de octubre

Vicente García
27/10/2020
 Actualizado a 27/10/2020
El fotógrafo Antonio Guerra ante varias de sus obras. | VICENTE GARCÍA
El fotógrafo Antonio Guerra ante varias de sus obras. | VICENTE GARCÍA
Cuando las personas  contemplamos y fotografiamos el paisaje lo hacemos constreñidos por unos cánones de belleza que se van modificando de acuerdo con los intereses o modas de cada época. El paisaje, en si, no varía sustancialmente, cambian las perspectivas y los modos de ver de las personas, quienes lo modifican de acuerdo con sus necesidades o intereses, construyendo edificios y ciudades, inundando valles, modificando el cauce de los ríos, destruyendo montañas en su propio beneficio, construyendo vías de comunicación y otras manipulaciones que han modificado los lugares desde siglos atrás hasta ahora, sobre todo en las últimas décadas. Solamente la naturaleza se transforma a sí misma en grandes catástrofes naturales: inundaciones, volcanes o terremotos, mucho menores que las humanas.

Y es en esa transformación a cargo del ser humano, en su propio beneficio, como analiza Antonio Guerra los distintos paisajes en una aproximación interdisciplinar, combinando fotografía con escultura e instalación en una continua reflexión sobre los procesos de transformación del paisaje y nuestra percepción del mismo a través de la imagen, interviniendo a su modo: componiendo, descomponiendo y volviendo a componer por medio de fotografías la realidad tal cual es o como se encuentra modificada por el hombre. Él mismo afirma: «A mí me interesa mucho tratar esa transformación del paisaje, la percepción que tenemos de este paisaje contemporáneo a través de la imagen, sobre todo. Son los dos ejes sobre los que gira el trabajo y se puede decir que le he dado mucha importancia a ese proceso de búsqueda de la naturaleza, de intervención en la propia naturaleza». Es lo que el espectador puede contemplar en su visita a la exposición en la sala Provincia del ILC.

Antonio Guerra es un fotógrafo que aisla la realidad del paisaje integrándola en un todo que representa con sus imágenes e intalaciones. Expresa así su forma de acercarse al medio natural: «Me interesa mucho cómo es la transitoriedad de los elementos naturales y las imágenes que se recrean en elementos que yo me puedo encontrar en la naturaleza y la propia imagen del paisaje».  Y a continuación expone su forma de trabajar: «Trabajo a partir de lo que me encuentro y lo que a mí me sugiere y con ello compongo la fotografía, pero previamente he descompuesto la naturaleza que observo para poder después componer mi obra». Y lo que resulta es una visión muy particular, muy propia de ese paisaje que he visto y trabajado».Y es que el paisaje tiene una serie de características que hacen que sea considerado como estéticamente agradable, aunque en ocasiones las transformaciones humanas modifican esa hermosa naturaleza inicial variando del todo la concepción de la belleza en ese paisaje. Y eso se puede ver en sus imágenes y cómo el autor reflexiona acerca de las mismas y su búsqueda continua: «Cómo vincular la transformación del paisaje llevada a cabo por el hombre con la trasformación de la propia fotografía contemplada como un objeto. Son cosas que me interesan mucho y con este tipo de piezas intento recrear un poco ese mismo paisaje en la sala».En una de las piezas utiliza una combinación de paisaje con los resultados de una tarjeta dañada, pues, como explica: «Utilizo lo que es propio de la imagen, el error del hombre en la naturaleza y el error técnico en la imagen». Así crea una pieza diferente a partir de errores diferentes. También muestra restos de construcciones, ruinas que se pueden encontrar en la naturaleza y que son producto de intervenciones humanas en el pasado que están arrumbadas en el olvido. Acerca de esta pieza el autor comenta: «En lugares que encontramos, las ruinas son intrínsecas al paisaje, forman parte del mismo paisaje, no son elementos naturales en sí pero dependen del lugar dónde los encuentres, forman parte del propio paisaje».

La exposición que ahora concluye está solapada con otra que el mismo autor está llevando a cabo en el centro Nienmeyer de Avilés sobre la mina a cielo abierto ‘Cota Pastora’ en la zona de Santa Lucía, donde se puede hablar de una ingente modificación del paisaje por parte del ser humano para beneficiarse en la extracción del mineral de la tierra sin necesidad de abrir pozos, pero modificando enormemente el paisaje sin que nadie hable de restaurarlo.

Además, en estos momentos los proyectos pueden o no salir adelante, como el de Photoespaña en Madrid, porque el Covid ha afectado a numerosos proyectos en este último año y, aunque esta exposición y las otras del autor ha sido posible llevarlas a acabo, con un parón muy acusado en las actividades culturales. Como dice: «yo he tenido suerte y los proyectos se han podido retomar más adelante, porque estaban programados para antes, pero otros compañeros no han podido llevar a cabo esas actividades que venían proyectando desde tiempo atrás».

Hasta ahora la exposición ha sido muy apreciada por muchos leoneses que han visto su obra y el día 27 comenzará su exposición de Photoespaña que finalizará el 1 de noviembre: (https://www.phe.es/presentamos-a-los-4-seleccionados-de-la-quinta-edicion-de-hacer-foro-photoespana-comunidad-de-madrid/). La del ILC,que se puede ver en León,  finalizará el 31 de octubre.
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