El Museo de la Radio

Uno de nuestros paisanos más universales es, sin duda, Luis del Olmo; una de las voces más conocidas de la radio en toda España en la segunda mitad del siglo pasado que hizo protagonista –nunca mejor dicho– a nuestra tierra, y especialmente al Bierzo que le vio nacer, a través de las ondas.

Nombrado hijo predilecto de Ponferrada en 1996 –entre otras muchas distinciones–, da nombre al Museo de la Radio de la ciudad –de hecho, se expone su colección–, que es de titularidad municipal y se encuentra en la llamada ‘Casa de los Escudos’, un edificio del siglo XVIII –con una gran planta trepadora en una de sus fachadas– en pleno casco antiguo; y que fue inaugurado tal día como ayer, 22 de marzo, del año 2003.

En el museo se encuentran más de doscientos aparatos de radio –y unos cuantos más que no se muestran al público– de distintas épocas. Pero, además, se realiza un rápido repaso por la historia de la radio –desde sus orígenes mismos, entremezclados con los de las comunicaciones por ondas–, resaltándose algunos de los hitos más relevantes como, por ejemplo, que Guillermo Marconi logró en 1896 el intercambio de señales por telegrafía sin hilos, o que fue Reginald Fessenden, en 1906, el primero en conseguir transmitir una voz humana. O el ‘radioboom’ que se vivió en la década de 1920 en todo el mundo –en España, Radio Ibérica comenzó a emitir en septiembre de 1923 y, en 1924, había ya varias emisoras… aunque escasos receptores– o la aparición de nuevos géneros –radioteatro, radionovelas…– en la de 1930… Y, lo que es aún mejor, a través de distintas audiciones se puede escuchar cómo sonaba la radio en diferentes épocas.

Asimismo, en el museo se expone también material de locutores históricos como son Bobby Deglané y José Luis Pécker. Y –faltaría más– Luis del Olmo, que cuenta con un espacio propio dedicado a su figura.

Es el propio Luis del Olmo, por cierto, quien te despide al salir del museo. Espero, eso sí, que sea por poco tiempo, que no quisiera tardar en volver…